El Juventud de Torremolinos logró hace unas semanas su permanencia matemática un año más en la Tercera División. Se sobrepusieron a un mal arranque a base de casta, entrega y un estadio como El Pozuelo que siempre respondió. Ayer, en el partido adelantado de la última jornada, demostró el porqué de la importancia de su feudo: 8-0 al CDE Melistar.

No titubeó el conjunto torremolinense ante los melillenses. Se repartieron los goles a partes iguales en cada mitad. Al descanso se fueron con los tantos de Agüero, Ibón Arrieta, Amaya y Zamorano. La segunda mitad fue el turno de Ballesteros, que hizo triplete, y para Agüero, que repitió firmando su particular doblete.