Los jugadores del Málaga, los veteranos y los más recientes, ya conocen el poder de intimidación de La Rosaleda. Y del factor extra que supone para su futbolista cuando rompe a hervir. La jornada de ayer fue un desfile de futbolistas blanquiazules encomendándose al jugador 12. Ellos, a su manera, pueden empezar la remontada.

"La afición, como todos los domingos, va a llenar el estadio y desde el primer minuto va a animar. Nosotros lo agradecemos, sabemos que tendremos el apoyo del público. Esperemos que las ganas de los jugadores y el plus que nos da la afición pueda hacer que pasemos", señaló Nacho Monreal.

En un tono similar se expresaron otros de los recién llegados esta temporada, Van Nistelrooy y Buonanotte. "En el partido de ida demostramos que se puede. Ahora, en la vuelta, con nuestros aficionados, intentaremos lograr el pase. La ayuda de la afición será clave para superar al Real Madrid", indicó el holandés; más gráfico aún fue el optimismo mostrado por el Enano: "Sabemos que en La Rosaleda somos mucho más que once, por lo que esperamos contar con el apoyo incondicional de toda la afición. Estamos convencidos de que se puede superar esta eliminatoria. Lo tenemos todo para conseguirlo. No hay nada imposible".

Caballero quiere otro de esas noches mágicas que ya ha vivido: "Jugadores y aficionados tenemos que creer que podemos conseguir una clasificación histórica. La Rosaleda tiene que rugir para empujarnos y pasar la eliminatoria. Ojalá haya un ambiente espectacular".

En el bando contrario, Mourinho dejó claro que vienen escarmentados: "La campaña de podemos del Málaga tiene credibilidad, porque les basta con ganar para pasar de ronda".