Balonmano l Campeonato de Europa

Francia, de leyenda

  • Los galos ganan a Croacia (21-25) y se convierten en el primer equipo que encadena los títulos mundial, olímpico y continental

La selección francesa entró en la historia al convertirse en el primer equipo que encadena los títulos olímpico, mundial y continental, tras imponerse a Croacia (21-25) en la final del Europeo de Austria, en un choque en el que el conjunto galo demostró ser el mejor de todos los tiempos.

El encuentro parecía destinado a convertirse en un duelo entre el francés Karabatic y el croata Duvnjak, pero todo el protagonismo recayó, al menos de inicio, en los guardametas Omeyer y, sobre todo, el balcánico Alilovic. El portero del Reale Ademar de León se agigantó en cada ataque galo hasta convertirse en un muro para los franceses, que echaron de menos los tantos de un Karabatic que cerró los primeros veinticinco minutos de juego con un gol. Esta pobre estadística fue calcada por la estrella croata, el central del Hamburgo Duvnjak.

Con Karabatic desaparecido, Croacia logró llevar siempre la delantera en el marcador: 12-9 a menos de dos minutos y medio para llegar al descanso. Pero la estrella gala despertó antes del descanso con dos impresionantes goles para igualar antes del intermedio (12-12). Su resurrección sirvió como detonante para el cuadro francés, que en la segunda parte demostró que no es sólo el mejor equipo del mundo, sino posiblemente el mejor conjunto de la historia. Su supremacía reside en una espectacular defensa. Esto permitió a los bleus adquirir una renta de cuatro tantos (14-18), que para la mayoría de los rivales, estando Francia de por medio, supone una auténtica condena a muerte.

Pero si hay alguien capaz de revelarse contra el destino esa es la selección croata, que de la mano de Ivano Balic y especialmente de Alilovic, se situó a tan sólo un gol (18-19) mediada la segunda mitad. Pero los errores ante Francia siempre se pagan caro y, en plena remontada, la expulsión de Mataija fue suficiente para que Francia volviera a dispararse (18-22). Al final, con 21-25, Francia no sólo conquistó por segunda vez en su historia el trono europeo, sino, entrar en la leyenda al ser el primer equipo que encadena los títulos olímpico, mundial y continental.

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