Deportes

Futuro en brasileño

  • Rafa Freire y Augusto Lima reflexionan tras la temporada de su debut en la élite, agradecen la confianza que Aíto deposita en ellos y esperan un futuro de éxitos

En una temporada confusa con más sombras que luces, dos de las mejores noticias recibidas por el Unicaja han sido los debuts de Rafael Freire Luz (Sao Paulo, 1992) y Augusto Cesar Lima Brito (Río de Janeiro, 1991). Son dos de los proyectos más sólidos de la cantera y Aíto tiró de ellos en momentos comprometidos y les dio cancha. Freire jugó 13 partidos, con 10 minutos de media. Lima se fue hasta los 17 encuentros, con 14 minutos en cada uno de promedio. Ambos son brasileños de nacimiento, aunque Freire es español a todos los efectos, seleccionable incluso. Lima está en camino de ello. Este verano espera los papeles.

Al acabar la temporada, la agenda de los dos ha sido intensa. Lima, después de recuperarse de una molesta rotura por un estrés en un dedo del pie -"aún no estoy al 100%"- estuvo en Treviso, en el prestigioso Eurocamp. Los dos han trabajado en Los Guindos, en los clinics que han ofrecido Sito Alonso y Pepe Laso. Freire se fue después a Estados Unidos para entrenar a las órdenes de técnicos de la NBA para perfeccionar su juego. Ambos harán la pretemporada con el primer equipo. Falta dilucidar el papel que tendrán a lo largo de la temporada.

"No me esperaba jugar en ACB y fue muy una experiencia bonita. Tuve suerte de que Aíto me viera y me diera la oportunidad. Ha sido para mí increíble debutar en la Euroliga y ACB", relata Lima sobre sus primeros pasos en la élite. El ala-pívot ha sido un buen apoyo para Freire. Se conocían desde que coincidieron en la selección cadete de Brasil. Que uno estuviera aquí en Málaga fue importante para que el otro diera el salto. Freire había probado con clubes como el Madrid o el Estudiantes, pero se decidió por Málaga. Tres hermanas suyas han sido jugadoras de élite y todas han militado en algún club español. Tiene un cuñado español que le ayudó a mejorar el idioma. La espera del pasaporte español le ha tenido dos años parado, apenas ha jugado un puñado de partidos en categoría inferior. Por ello, ha paladeado cada minuto. "Jugar un partido en junior, LEB o ACB era una gran alegría. Hace tres años jugué 12 partidos, algún intersector, el año pasado el circuito sub 20... Hasta noviembre pasado, nada de continuidad. Todo el mundo decía la semana que viene y no salía, la otra, y nada. El siguiente partido, tampoco... Me creaba expectativas de jugar y me daba un bajón cuando me decían que no podía. Mi madre estaba por aquí y me ayudó. He entrenado muchísimo más que si hubiera jugado, pero como en un partido no aprendes".

Ambos se deshacen en elogios para Aíto, el técnico que les ha dado la alternativa en la ACB. "Es un entrenador muy completo, que sabe mucho, para mí ha sido muy fácil. Te pide que corras o rebotees, lo que estás capacitado, nada más", dice Lima, lo que corrobora Freire: "Es el entrenador perfecto. Te enseña a jugar fácil, no te mete presión nunca y es ideal para jugar al máximo nivel. He aprendido mucho con él. No te pide cosas difíciles. Si todo el equipo entiende lo que quiere, las cosas salen fáciles, seguro. Si el equipo está coordinado, lo hará bien seguro".

Los dos no tienen aún noticias definitivas del club sobre cuál será su rol la próxima campaña. Lima espera el pasaporte, aunque no tiene prisa. "Jugar como extracomunitario en ACB con 18 años me dijeron que sólo lo había hecho Scola. Y Scola sólo hay uno. Splitter, por ejemplo, estaba en Bilbao en LEB. El Clínicas estará ahí y también se puede progresar. Por ejemplo, en ACB tienen mucho más físico que nosotros. Si alguien es más fuerte, pues habrá que ganarle por velocidad. Es usar un poco la inteligencia. En LEB, por ejemplo, tengo que aportar muchas cosas, en ACB tres cosas valen. Correr y rebotear. Me costó mucho más jugar en LEB que en ACB. Hay personas que no tienen físico, pero tienen la cabeza. La experiencia te mata. Hay mucho veterano, como Middleton. ¿Cómo puede un tío de 40 años jugar así, madre mía?", dice divertido Lima.

Freire destaca por su físico explosivo con el que domina en categorías inferiores. Sabe que eso no basta en la élite a la que aspira jugar. "Ahora arriba la cosa se complica físicamente. Hay que jugar muchísimo más duro. Los árbitros dejan pegar, empujar, es muy diferente. Sólo el salto de LEB a ACB se nota mucho", dice el base de Sao Paulo, que sí nota la diferencia, aunque agradece el apoyo de los compañeros en la pasada temporada: "Omar [Cook] fue el que más me ayudó. Cómo usar el cuerpo, hacer el dribbling, utilizar el bloqueo... Shammond Williams también hablaba bastante conmigo. Berni, Carlos Jiménez, hasta el mismo Robert [Archibald], que me decía cómo había que pasar los bloqueos". Le ratifica Lima: "Nos ayudan mucho. Archibald siempre me habla mucho. Cómo ponerme en el rebote, en esta defensa o en la otra. Jiménez también ayuda. Hay respeto porque es el más veterano. Cuando habla todos callamos. Como dice Berni, es el capitán de capitanes".

Esperanzados en un futuro en el primer equipo del Unicaja no muy lejos, Lima y Freire se divierten hablando de fútbol, aunque alicaídos porque esperaban más de Brasil en este Mundial. Freire, que en su infancia era portero de fútbol y nadador, se acabó decantando por el baloncesto como sus hermanas. Es hincha del Corinthians y admira a Ronaldo. "Está gordo, pero sigue siendo increíble", asegura ahora que le disfruta en su equipo. Lima, nacido en Río, es del Fluminense y también le gusta Robinho además del citado Ronaldo. En Brasil el fútbol manda pero ellos juegan al baloncesto y allí encontró el Unicaja un buen vivero. Y el futuro del club se escribe en brasileño, pasa en buena medida por la progresión que tengan los dos en las próximas temporadas.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios