Jorge Garbajosa apenas había entrenado durante la semana y tampoco jugó ante el Real Madrid. Está entre algodones desde hace varias semanas porque arrastra una tendinitis en las dos rodillas. El cuerpo técnico, en connivencia con el médico, tenía decidido hacerle parar hasta el próximo viernes para que reposara. Pero tendrá que parar seguramente por más tiempos. Ya en el último cuarto, cuando peleaba por un balón suelto, el gemelo de su pierna izquierda dijo basta.

La primera exploración determinó que era una rotura fibrilar. Hoy se le realizarán más pruebas para constatar la dimensión de la rotura, una vez baje la inflamación. Garbajosa abandonó las instalaciones del Carpena dolorido, apoyado en unas muletas. La sobreutilización del madrileño, admitida por los propios técnicos, propicia que uno de los líderes dentro y fuera de la pista deba parar por un tiempo.