Corren días impregnados de ilusión en la Universidad de Greensboro. Casi dos décadas de ausencia en el March Madness es demasiado y esa es la principal razón por la que la presencia en el prestigioso torneo americano se celebra así. Se congregaron alrededor de medio millar de personas para vivir en directo con el equipo el Selection Sunday, el evento que determina los 68 equipos en liza y en el que se reparten los cabezas de serie para conformar el bracket del gran baile.

Le tocó Gonzaga a la Greensboro que lidera Francis Alonso. El malagueño deberá hacer frente a un equipo en el que recientemente se formaron jugadores que ahora acaparan elogios en distintos escenarios como Domas Sabonis o Kevin Pangos. El canterano del Unicaja se hace un nombre en la NBA con un excepcional rendimiento en los Indiana Pacers y el base es la batuta del Zalgiris de Saras Jasikevicuis, revelación de la Euroliga. También se curtió en el equipo de Washington el pívot ACB Przemek Karnowski, cedido por Morabanc Andorra en el Montakit Fuenlabrada. Aunque el torneo comenzará hoy con conjuntos distinguidos como UCLA y Syracause abriendo fuego, el partido de los Spartans frente a los Zags será el jueves a las 18:30 hora española.

En la tercera participación de Greensboro en el March Madness tendrá que hacer frente a un duro hueso en primera ronda. Gonzaga terminó la temporada regular en el puesto número seis en las encuestas del país después de firmar un récord general de 30-4 -el equipo de Alonso tiene un 27-7-, lo que le valió para ganar el título de la conferencia de la Costa Oeste y el título del torneo por sexta vez consecutiva.

La química que se ha creado en la plantilla que dirige Wes Miller invita a creer en la proeza, más después de la notable temporada. Con el leitmotiv de Just Never Stop -"Nunca te detengas" en castellano-, Francis Alonso y compañía quieren seguir haciendo historia.