El Atletismo Málaga despidió el Campeonato de España en pista cubierta con otra medalla de oro, la conseguida ayer por Óscar González en el heptathlon. El malacitano, que sumó un total de 5.601 puntos, venció en la modalidad de pruebas combinadas debido a que los cubanos Yordanis García y Leonel Suárez, que totalizaron 5.905 y 5.891 puntos, respectivamente, competían fuera de concurso, por lo que González acabó la cita celebrada en el Centro Deportivo de San Pablo como el otro triunfador malagueño tras el oro del pasado sábado de Borja Vivas en el lanzamiento de peso.

El malacitano basó su victoria en una gran regularidad y en la mejoría mostrada ayer. No ganó ninguna de las pruebas, pero siempre se mantuvo entre los puestos altos, exceptuando los 60 metros, en los que acabó décimo. A partir de ahí, fue cuarto en salto de longitud, sexto en lanzamiento de peso y séptimo en altura en la jornada del sábado.

El empujón definitivo lo dio ayer. Fue tercero en los 60 metros vallas, cuarto en pértiga y tercero en los 1.000 metros. En total, 5.601 puntos que se convierten en la mejor marca personal bajo techo de González, a la espera de un billete que le permita acudir al Europeo que se celebra en Turín en quince días. Su presencia y la de Borja Vivas, aunque todavía no esté confirmado, parece definitiva.

Una presencia a la que también opta Josué Mena, del Cueva de Nerja-UMA, por la plata conquistada en los 200 metros. El velocista se clasificó para la final con el mejor segundo tiempo del sábado y ayer siguió en la misma línea al registrar 21.82 segundos.

Sin embargo, no le sirvió para superar al zaragozano Alberto Gavaldá, de 16 años, que se proclamó campeón con una marca de 21.37, nuevo récord nacional en las categorías juvenil y júnior. Gavaldá, que entrena a las órdenes de su padre, Ángel, sorprendió a Josué Mena, campeón en 2006 y 2007 y principal favorito en todas las quinielas.

No le fueron tan bien las cosas al también nerjeño Álvaro Fernández, uno de los candidatos a la victoria en el 1.500 por lo visto en la jornada del sábado, en la que marcó el mejor tiempo (3:44.62). No obstante, no la pudo repetir y finalizó la carrera en quinta posición merced a sus 3:47.92.

El triunfo final fue para Arturo Casado (3:46.94), que consiguió su segundo título español en pista cubierta con una exhibición autoritaria desde la salida, sin permitir que Diego Ruiz, el hombre que llegaba con mejor marca (3:36.42), se le pusiera nunca por delante. Fue la final más polémica del campeonato, ya que Ruiz pensó que las maniobras de Casado para cerrarle el paso cada vez que intentó adelantarle no fueron reglamentarias.

En féminas, la nerjeña Pilar Cortacero participaba en la final de los 200, pero no pudo subir al podio tampoco. Terminó en sexta posición tras registrar 25.42, por los 25.19 de Estela García, ganadora. En peso, Lorena Aguilar fue quinta (14.31 metros), muy lejos de Magnolia Álvarez (16.11).