La ACB continúa sin anunciar oficialmente la sede de la Copa de 2017, pero las instituciones malagueñas la dan prácticamente por perdida para centrarse en posteriores ediciones, con las que hay buenas perspectivas.

"Oficialmente no se anunció nada, pero no nos han dado buenas noticias", explicaba ayer en la Cadena Ser Elisa Pérez de Siles, concejal de Deportes del Ayuntamiento de Málaga: "El hecho de no tener noticias es indicativo de que no estaba claro para Málaga. Habíamos apostado de inicio por 2018 o 2019 para estar más cerca de la capitalidad europea, pero se abrió la opción de 2017 porque conocíamos que Madrid no formalizó el contrato y entendíamos que el impacto para la ciudad es bueno".

Pérez de Siles aludió a que se trata de un "tema económico. La ACB solicitaba un canon y la oferta consensuada por las tres administraciones iba debajo de canon. Y otras ciduades [Las Palmas] han ofertado por encima de lo que pedía la ACB. La ACB se plantea viniendo a Málaga otras muchas cuestiones, como el escaparate y mejor escenario para este tipo de eventos. La afición, el clima, las instalaciones... Ya teníamos negociaciones avanzadas para años siguientes y seguimos con ellas", explicó. Ayuntamiento, Diputación y Junta, que pidió que en el paquete fuera una Supercopa para Sevilla, esperan asegurar 2018 o 2019.