Hace tres semanas hubiese sido otra decepción en la colección, una herida más en un cuerpo cargado de cicatrices. Pero ayer el Málaga defraudó sobremanera a sus fieles. Comoquiera que los blanquiazules habían construido un camino ante Real Sociedad y Espanyol (seis puntos y numerosas virtudes con invitación a la reconquista), el escozor, por inesperado, pica más. Aquel equipo agresivo, conjuntado en la presión, buscador de las bandas y solidario en el esfuerzo pareció irse de excedencia. Detectar si por una mala tarde o una bajada de amperios inducirá el grado de inquietud que tendrá el aficionado. 

El equipo de Pellegrini tiró por la borda el buen rebufo que había acumulado con sus dos triunfos encadenados. No debería sorprender por la tónica general de la temporada, pero Málaga se había vuelto amnésica de los capítulos anteriores a Anoeta. Era posible la derrota, pero inesperada la ausencia en el vital combate. Lo primero es recuperable; lo segundo, preocupante. 

A los nueve minutos los blanquiazules perdían 2-0 tras dos jugadas en las que los granotas recibieron sin marca y asistieron a compañeros sin oposición. Stuani y Rubén Suárez dejaron su muesca. Y si el uruguayo no repitió el esquema en el tercer tiro a puerta del Levante fue por las manos de Caballero. Pura facilidad para los de Luis García, para quienes un balón en largo era una ocasión. Sucedió esto porque la primera cita de Kris y Demichelis resultó un desastre (más les vale una mayor empatía ante el Deportivo). Ni se entendieron ni se ayudaron. El danés estuvo lento y apático; el argentino, irreconocible y tibio. Véase las carambolas del tercer gol para entenderlo. Por delante de ellos hubo demasiados jugadores a los que se les olvidó que a sus espaldas había otra portería. Faltó la conjunción de líneas vista en los choques precedentes para hacer una presión efectiva y mejores ayudas entre los que ocuparon los carriles. Con un partido muy plácido para los locales, los de Pellegrini designaron a Duda como única albacea para la remontada. Munúa abortó bien antes del descanso el único golpeo serio del luso a balón parado. Así que el Málaga se marchó al descanso deprimido y chuchurrido, como aquellas mañanas en Vallecas que estigmatizaban al equipo de Joaquín Peiró. 

Los de Pellegrini volvieron mejor maquillados de vestuarios. Se abrió ese indescifrable tramo en que el que gana parece que no puede hacerlo mejor ni peor el que va perdiendo. Esa rendija habilitó un amago de mejoría en el único ataque bueno del partido. Cabalgó Jesús Gámez intentando abrirse hueco entre las malezas y conectó con Sebastián Fernández, gran giro el suyo y paciente definición ante Munúa. Arrancó el zafarrancho blanquiazul y Luis García dejó a Stuani, Xisco Nadal, Valdo y Juanlu descolgados para pescar algún contragolpe. Ganó la jugada el técnico granota, mientras Pellegrini se tocaba la cara viendo cómo su equipo no metía miedo. Llegó el número circense del 3-1 y sólo entonces el Málaga se volvió visceral. Antes de eso, se marchó al descanso con un una sola falta a favor; en el cómputo global, fueron cuatro. Ahora el problema es saber qué Málaga, si el de ayer o el anterior, espera para subir la cuesta arriba.

FICHA TÉCNICA:

Levante: Munúa; Javi Venta, Ballesteros, Nano, Juanfran (Del Horno, 46'); Iborra, Pallardó; Valdo, Rubén Suárez (Xisco Nadal,63'), Juanlu; y Stuani (Rafa Jordá, 84').

Málaga: Caballero; Jesús Gámez, Kris, Demichelis, Eliseu; Portillo (Quincy, 69'), Apoño (Sandro Silva, 75'), Recio (Maresca, 62'), Duda; Sebastián Fernández y Rondón.

Árbitro: Iturralde González (vasco). Amonestó a Juanfran (26'), Eliseu (40'), Iborra (47'), Apoño (47'), Duda (47'), Del Horno (52'), Ballesteros (76'), Pallardó (79'), Sebastián Fernández (92') y Rondón (93')

Goles: 1-0 (6'): Stuani define con un disparo cruzado ante Caballero para hacer bueno el pase entre líneas de Rubén Suárez y el fallo de Jesús Gámez al tirar el fuera de juego. 2-0 (9'): Rubén Suárez, con un cabezazo picado, remata el centro templado de Valdo. 2-1 (61'): Gran jugada de Jesús Gámez, asiste dentro del área a Sebastián Fernández y éste supera por bajo a Munúa. 3-1 (71'): Centro de Juanlu a Javi Venta, éste busca a Valdo, dispara mal y el rechace, ante la pasividad de Kris y Demichelis, beneficia al que la empuja, Stuani.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésuima jornada de la Liga BBVA en el estadio Ciutat de Valencia ante unos 20.000 espectadores.