El sufrimiento sigue anegado en Marbella. El equipo de Adrián Cervera volvió a caer derrotado, esta vez ante su afición, ante un Martos que con poco se llevó los tres puntos del Municipal de San Pedro. El conjunto marbellí llegó a perder los nervios por momentos y acabó con dos hombres menos sobre el césped, echando por tierra la superioridad numérica que le dio la expulsión del guardameta jienense. Los locales llegaron a fallar una pena máxima y acabaron desesperados ante su infortunio, que le mantiene una semana más en la zona baja de la clasificación.

El Martos comenzó mucho más enchufado en el partido y a los cinco minutos ya se encontraba por delante en el marcador. Francis, de falta directa, adelantaba a los suyos e instauraba el nerviosismo entre los aficionados, que encadenan dos años sin poder disfrutar de una alegría marbellí.

Los hombres de Higinio Vilches controlaban el encuentro e incluso disfrutaban de ocasiones para ampliar el marcador, mientras que el Marbella sólo oponía resistencia en jugadas aisladas, en las que la mala fortuna les impidió conseguir el empate. La gran oportunidad de los locales apareció desde los once metros. Un penalti señalado por el colegiado, con la consecuente expulsión del guardameta visitante, no fue suficiente para que el equipo de Adrián Cervera pudiese empatar. Jesús adivinó la intención del jugador marbellí y el marcador no volvió a moverse.

En los treinta minutos restantes los locales tendrían varias oportunidades más para conseguir la igualada, pero la inoperancia de cara a puerta se hizo efectiva. Con el paso de los minutos, el nerviosismo se fue apoderando de un Marbella impotente ante la facilidad con la que el Martos se estaba imponiendo en la contienda. Esto provocó que en dos duras acciones el conjunto local se quedará con nueve jugadores sobre el césped, tras las expulsiones de Cuevas y Henares.

Así, el partido se puso muy cuesta arriba para los de Adrián Cervera que, a pesar de todo, tuvieron una clara ocasión para empatar. La derrota sume al Marbella en la zona baja de la clasificación sin un solo punto y con una imagen que aún debe mejorar para optar, al menos, a la permanencia en Tercera División.