Las excelentes prestaciones de Boniface Ndong tendrán su recompensa para el espigado jugador senagalés. El Unicaja tiene decidido ejecutar la cláusula en su contrato por la cual puede prolongar de manera unilateral el compromiso con el gigante africano por una temporada más.

Será algo público cuando finalice la temporada (el plazo para usar la citada cláusula abarca hasta días después de que acabe la campaña), pero es ya una decisión firme de la dirección deportiva del club, independientemente de quién sea el próximo técnico del club. La carestía de hombres altos de calidad en el mercado hace que Ndong sea una pieza codiciada y algún club de la ACB ha preguntado ya por la situación del jugador a su agente. Pero el Unicaja tiene la sartén por el mango y usará su privilegio para mantener en nómina al senegalés. Hombres de 2,13 con su capacidad atlética no abundan en el mercado. Una vez renovado el nuevo pacto de contratación de jugadores, Ndong mantendrá su condición de europeo por su matrimonio con una ciudadana alemana, con la que tiene dos hijos en común, por lo que no habrá los problemas con el asunto de los cupos que sí pudieron existir al principio de esta temporada no volverán. Mantendrá su status quo.

El fichaje de Ndong se ha revelado como una de las mejores gestiones en relación calidad-precio del Unicaja en los últimos tiempos. Su sueldo está en la mitad baja de la plantilla, pero su rendimiento satisface de manera notable al cuerpo técnico. Durante el verano pasado prácticamente se había desechado su continuidad a pesar de las buenas sensaciones que ofreció el jugador en los tres partidos del play off ante el Tau. Llegó procedente del Spartak de San Petersburgo, avalado por Ettore Messina, que lo había padecido en los enfrentamientos ante el CSKA. Había acabado como máximo reboteador y taponador de la liga rusa. Gustó en esa breve puesta en escena en Málaga, pero el encaminado fichaje de Kosta Perovic y alguna duda sobre el estado de sus rodillas le hicieron pasar a segundo plano. La marcha del serbio a la NBA y nuevas pruebas en las articulaciones propiciaron su contratación. Ndong ha despejado dudas sobre su estado físico jugando 49 de los 50 encuentros oficiales disputados hasta ahora. Sólo se perdió el partido ante el Le Mans en casa de la Euroliga y fue por precaución, para darle descanso a sus cargadas rodillas. Sólo Popovic y Kus no se han perdido ningún duelo en todo el año. El senegalés acumula 8,8 puntos, 5,1 rebotes y 1,3 tapones para un total de 10,9 de valoración en 19 minutos por partido. Ndong ha adelantado a Santiago en la rotación de pívots.

Plenamente integrado en la ciudad, los compañeros y los técnicos destacan la calidad humana y la profesionalidad de Ndong, que ha llegado tarde al baloncesto de élite tras peregrinar por equipos menores de Francia, Alemania y Rusia, con un paréntesis de una temporada en los Clippers de la NBA, y ahora disfruta de la recompensa a su esfuerzo.