Nada parece haber cambiado en el retorno a la Fórmula 1 del finlandés Kimi Raikkonen. ¿O sí? Lotus está encantado de momento con lo que está aportando el finlandés, que ayer estrenó en Jerez el nuevo bólido de la escudería con el mejor tiempo del día en el primer ensayo de la temporada.

"El coche funcionó muy bien. Las sensaciones son buenas", dijo restando importancia a su tiempo el escandinavo. Iceman es el apodo del poco expansivo piloto y la etiqueta que usa en twitter el equipo con la intención de convertirlo en tema de tendencia a lo largo de la temporada. A sus 32 años, Lotus confía en él para volver a los tiempos de gloria de 2005 y 2006, cuando la escudería ganó los títulos con Fernando Alonso, entonces con el nombre de Renault. "Viene con el compromiso de ganar y sabe lo que quiere", asegura sobre él Eric Boullier, responsable de la escudería, convencido de lo que aporta un campeón del mundo, uno de los seis que habrá en la parrilla en 2012.

El 18 de marzo Raikkonen disputará su Gran Premio número 157. De los anteriores ganó 18. "No espero que las cosas sean muy diferentes", dice respecto a los cambios en la Fórmula 1 durante su ausencia. "Los tiempos ahora no son importantes. Estoy contento con el equilibrio del coche, que parece bueno. He completado una distancia de un gran premio (73 vueltas) y no he tenido problemas", apuntó el finlandés sobre el primer día de pruebas, en la que logró el mejor registro de la jornada (1.19,670), seguido del Force India de Paul di Resta (a 102 milésimas) y el Mercedes de Nico Rosberg, a medio segundo con el monoplaza de 2011, a diferencia de Red Bull, Ferrari y McLaren. "Estamos en un proceso de ganar terreno y por eso necesitamos todos los días de desarrollo", explicó el director deportivo del equipo, Norbert Haug.