Raúl López le abrió al Gescrap Bilbao, sobre la bocina, la puerta de los cuartos de final de la Euroliga con una canasta en el último instante que le dio al equipo bilbaíno un triunfo vital (60-59) para sus opciones de clasificación.

Con esta victoria, el Bizkaia mantiene la ventaja sobre el Real Madrid en su pelea por la segunda plaza del Grupo F del Top 16, a la espera de lo que hagan hoy los blancos ante el Unicaja. Si los de Pablo Laso cayesen, el Gescrap estaría ya en los cruces de unos cuartos de final en los que le esperaría CSKA de Moscú.

Los de Fotis Katsikaris lograron, en un Bilbao Arena entregado, un triunfo que quedará para siempre en la memoria de la afición vizcaína, que no tuvo nunca un equipo de baloncesto que le dé tantas alegrías.

La de ayer fue ante unos de los mejores equipos de Europa, un conjunto que no dejó en ningún momento de pelear por la victoria, pero que se vio ante un rival entregado y con un jugador en estado de gracia en los instantes decisivos. Raúl López fue el héroe. No solo por la canasta final, sino por los cuatro tiros libres sin fallo anotados en los 20 segundos finales. Todo, pese a una pérdida suya de balón y dos puntos de Thorton a 11 segundos del final que parecieron enterrar las opciones locales.

El partido comenzó con los dos equipos extremadamente desacertados en ataque, hasta el punto de terminar el primer cuarto con un ridículo 7-8 en el marcador. No mejoró mucho la ofensiva en el segundo cuarto, al final del cual se llegó con 21-22 después de que comenzaran a aparecen en ataque jugadores importantes como Banic, Vasileiadis, Rakocevic y Ress.

Se confirmaron Banic y Rako en un segundo tiempo igualado hasta el extremo, también parco en anotación, que llegó al final del tercer cuarto 39-39 y que decidió, tras una sucesión de tiros libres, una canasta de dos sobre la bocina de Raúl López, al que el baloncesto le devolvió ayer parte del protagonismo que aún le debe.