Deportes

Rumanía, primer rival por la séptima plaza

  • Croacia-Montenegro y Hungría-Serbia, las semifinales que decidirán las medallas

La selección española masculina de waterpolo (al contrario que las chicas, ya en semifinales) no podrá optar a la lucha por las medallas. En el mejor caso, se tendrá que conformar con un séptimo puesto, aunque para conseguirlo tendrá que derrotar a otros dos rivales que tampoco verán posible su sueño de colgarse un metal.

El primero es Rumanía, que venció ayer a Eslovaquia (6-7). Si España consigue la victoria mañana, se las verá el sábado con el ganador del Rusia-Macedonia y aquí disputaría su último encuentro del Europeo y el que decidiría su puesto final, séptimo u octavo. Sin embargo, si no logra el triunfo ante los rumanos, pelearía contra rusos o macedonios por quedar noveno o décimo, escaso botín para España teniendo en cuenta la calidad de los jugadores españoles y el bronce en el anterior campeonato continental de Belgrado.

Por otra parte, ya están emparejadas las selecciones semifinalistas que se repartirán las medallas: Croacia-Montenegro y Hungría-Serbia, lo que cumple las previsiones, ya que eran las favoritas. Por un lado, la última campeona mundial, Croacia, luchará contra Montenegro, que confirma a los balcánicos como una potencia waterpolista. Por otro, húngaros y serbios reeditarán la última final de Belgrado, aunque unos quedarán fuera de la lucha por el oro.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios