El Villarreal preparó su visita a Oporto en la ida de las semifinales de la Liga Europa con el único objetivo de alcanzar la primera final continental de su historia a pesar del potencial del rival, campeón de la liga portuguesa y principal favorito de la competición.

La que se ha convertido en tercera semifinal europea del Villarreal está considerada como una final anticipada del torneo por el nivel de ambos equipos, superior a priori al de los rivales de la otra semifinal, la que mide a los portugueses Benfica y Sporting de Braga.

El equipo que entrena Juan Carlos Garrido afronta el partido con el objetivo de mantener el buen nivel demostrado en Europa, donde ha sido capaz de eliminar de forma consecutiva al Nápoles italiano, Bayer Leverkusen y a los holandeses del Twente.

El Villarreal necesita mantener su nivel para conseguir un buen resultado fuera de casa que le permita afrontar la vuelta en El Madrigal con opciones de alcanzar la final. Para ello, sus jugadores consideran necesario marcar al menos un gol en un encuentro que presumen igualado.

Para este choque, el técnico del Villarreal convocó a toda la plantilla con excepción del lesionado de larga duración Gonzalo Rodríguez. Así los también lesionados Marcos Senna, Ángel y Xavi Oliva viajan con su equipo.

La única duda con la que llega el Villarreal a este encuentro es la del centrocampista Borja Valero, que sufre una pequeña molestia muscular. Las dudas del equipo giran en torno a la posición que ocupará, bien como central o bien en la línea media, Carlos Marchena y la titularidad de Cani o Wakaso en el centro del campo.

La presión coordinada, el ataque a los espacios y la intensidad defensiva son las principales características del Oporto de Villas-Boas, que juega con un 4-3-3 con dos extremos abiertos y que tiene en el brasileño Hulk y en el colombiano Radamel Falcao sus principales referencias ofensivas. Entre ambos acumulan 63 goles en todas las competiciones.

El tercer vértice del ataque lo completará el extremo portugués Silvestre Varela, que destaca por su olfato goleador y técnica individual para tratar de hacer daño a la defensa del Villarreal.