Su discurso, tres días antes de que su equipo juegue el trascendental encuentro ante el Sporting de Gijón, invita a la mesura. Avezado en las contradicciones que el mundo del fútbol depara cada jornada, Fernando Sanz rehúye de un mensaje triunfalista y resta dramatismo al encuentro de este domingo.

-Todas las actividades programadas por el club para el partido ante el Sporting de Gijón del domingo magnifican la importancia del duelo. ¿Es el encuentro más importante de la temporada?

-Es un partido muy importante para la tranquilidad del equipo y de la ciudad y no voy a restar importancia al valor del resultado. Esta es la primera final contra un rival directo, pero quedarían nueve encuentros que serían 27 puntos. Es un paso más, pero todavía queda mucho por sufrir.

-Más que un paso, ¿no cree que el resultado puede ser determinante para ambos equipos?

-Repito que es muy importante, pero no creo que sea decisivo. Recuerda el partido ante el Elche y toda la corriente que se generó tras ese encuentro. Todos nos veían ya en Primera, todos menos los profesionales. Sabemos que la Segunda División es una categoría muy igualada y compleja en la que cualquier rival te puede poner las cosas difíciles. Además, en este momento de la temporada, todos los equipos se juegan algo, como nos pasó ante el Albacete o el Xerez.

-¿Que daría por jugar ese partido?

-[Piensa durante unos segundos la respuesta] Daría muchas cosas. Son el tipo de encuentros que a todos los futbolistas les gusta jugar. Yo he disputado partidos como el de este domingo y desde que comienza la semana sabes que en el ambiente hay algo especial. A los jugadores no hay que mentalizarlos porque saben que lo que hay en juego es muy importante.

-¿Y qué consejo le daría a sus jugadores?

-Simplemente que disfruten y que lo den todo por el escudo que representan.

-Tal es la trascendencia del encuentro que todos los colectivos sociales se han fijado como reto llenar este domingo La Rosaleda. ¿Qué siente con el apoyo que le está brindando la ciudad al club?

-Lo único que te puedo decir es que esta semana se me ha puesto la piel de gallina en más de una ocasión con las declaraciones de ex futbolistas, con las del alcalde, con el apoyo de las peñas o el de los medios de comunicación. Desde el Málaga sólo podemos transmitir nuestro agradecimiento a estas muestras de cariño y de apoyo.

-El objetivo de todos es llenar este domingo La Rosaleda...

-La afición se debe dar cuenta de su valor en el ascenso. Te voy a poner el ejemplo del año pasado, en el que nos encontrábamos en una situación complicadísima. Su apoyo en los últimos encuentros de la temporada fue clave para que el equipo alcanzara definitivamente la permanencia.

-¿Las medidas de esta semana serán el inicio de un proyecto que irá aumentado conforme finalice la temporada?

-Es algo que iremos estudiando porque sabemos que el apoyo de la afición es clave en este tramo de la temporada en el que te juegas tantas cosas. Pero lo que sí te puedo asegurar es que este presidente y sus jugadores están enormemente satisfechos y orgullosos de su afición y siempre daremos preferencia a nuestros abonados, porque ellos han sido los que nos han apoyado siempre.

-La última derrota ante el Numancia ha encendido las alarmas en parte del entorno por el calendario que se le avecina al equipo en las próximas jornadas. ¿Ve signos de preocupación en el vestuario?

-En absoluto. Después del partido ante el Numancia vi a unos jugadores que ya estaban muy mentalizados en la importancia del partido del domingo ante el Sporting de Gijón y que deseaban que llegara la hora del encuentro.

-¿Y, deportivamente, cómo ve al equipo?

-Lo veo bien. No voy a negar que los últimos resultados no han sido todo lo positivos que esperábamos. No podíamos mantener el nivel toda la temporada, pero estoy convencido de que los jugadores van a realizar un gran final de campaña.

-¿Habría usted firmado en el mes de agosto encarar el último tramo de la competición desde esta posición?

-Evidentemente. Es más, en agosto muy pocos hubieran soñado con ver al Málaga en esta posición. Nada es casualidad, todo es el resultado de un trabajo que se planificó cuando no había acabado la temporada y del esfuerzo del cuerpo técnico y el de todos los jugadores.

-¿Y con qué sueña Fernando Sanz?

-Sueño con ver al Málaga otra vez en Primera División, que es la categoría que le pertenece por la ciudad a la que representa. Es una empresa a la que hemos dedicado mucho trabajo para volver a ilusionar otra vez al malaguismo.

-Dentro de esos sueños me imagino que también estarán ver La Rosaleda llena este domingo y lograr la victoria ante el Sporting de Gijón...

-No cabe duda de que serían dos cosas muy bonitas que se produjeran porque daríamos un paso importante para que se cumpliera el objetivo que nos planteamos en verano.

-¿Ha trazado ya las líneas del proyecto en caso de que el Málaga ascendiera definitivamente a Primera?

-Primero tenemos que ascender y luego ya habrá tiempo para determinar el proyecto en Primera. Pero antes, lo más importante es el partido del domingo ante el Sporting y luego el del Racing de Ferrol.

-En ese futuro proyecto el club sí ha sentado ya las bases para ampliar los contratos de Calleja y de Weligton. ¿En qué punto se encuentran ambas negociaciones?

-Existe una gran disposición entre todas las partes y yo confío en que en los próximos días se pueda solucionar todo. Los dos han demostrado un gran compromiso con el club y nosotros queremos que continúen en el Málaga.