La Semana Blanca es una de esas fechas en las que los más pequeños disfrutan de unas merecidas vacaciones mientras sus padres tienen que trabajar y no ven la forma de que sus hijos se entretengan mientras tanto. La Escuela Deportiva Municipal (EDM) de judo ha ideado la manera de hacerlo. Con el Stage de Semana Blanca, que este año celebra su tercera edición y que permite a los padres dejar a sus hijos bajo la vigilancia de monitores que se responsabilizan del cuidado de los pequeños y que, además, garantizan su diversión. Ayer y también mañana (de 17.00 a 18.30), el Colegio Divino Pastor acoge esta estadía para los más pequeños de la Escuela Municipal de judo.

Los objetivos de esta concentración son, en primer lugar, evaluar a los alumnos mediante controles. En esta ocasión se han centrado en los aspectos tácticos, psicomotrices y físicos. "Es fundamental poder obtener la mayor información posible para poder ofrecer a los clubes locales a nuestros judocas en las mejores condiciones posibles una vez hayan terminado nuestro programa", explica el coordinador de esta Escuela, Antonio Jurado. De esta forma, se consigue uno de los principales objetivos de las Escuelas Deportivas Municipales, desarrollar en los alumnos sus cualidades físico-deportivas atendiendo y mejorando sus aptitudes y posibilidades.

Debido a que existen cuatro centros en la capital en los que se enseña judo (Tiro de Pichón, Trinidad, Ciudad Jardín y Colegio El Divino Pastor), son estos stages unas ocasiones ideales para que los alumnos se conozcan y fomentar las relaciones sociales ente los ellos. "Así damos forma a otro objetivo de la Escuela, realizar un programa de actividades atractivo a través de clases regladas, campeonatos internos-externos, proyecciones y conferencias, entre otros", continúa Jurado.

"Con esta actividad, conseguimos completar el proceso que los técnicos hacen en sus centros para detectar futuros valores y talentos deportivos en la provincia", concluyó el coordinador de esta Escuela.