La cuenta atrás de la vuelta al trabajo avanza cada día con mayor celeridad. Al Málaga ya sólo le quedan cuatro días para empezar con los controles médicos rutinarios y seis para emprender viaje a Campoamor, donde emprenderá su primera concentración estival.

Jugadores y técnicos apuran sus últimos días de receso antes de embarcarse en la temporada más ilusionante de la historia del Málaga. Pellegrini, que ahora se encuentra de viaje de placer por Europa, ya dejó dicho en el club que regresaría a primeros de mes. Así que se le espera durante estos días. Había dejado unas directrices muy claras para reforzar el equipo. Un delantero goleador, un segundo punta, dos centrocampistas, un central diestro eran sus prioridades. También dijo que no vería mal la llegada de un lateral derecho.

Todos, con la salvedad del goleador, debían cumplir la premisa de conocer el fútbol español para así proporcionar una mejor aclimatación al equipo. Que tuvieran experiencia en Europa sería otro ingrediente añadido. Por lo visto con Negredo, el nueve también se va a ajustar a esas características.

También saben en la dirección deportiva qué jugadores de la treintena que tiene el club en nómina no cuentan para el técnico. Con las ideas tan claras como están, sin embargo, hasta la fecha el Málaga es junto al Real Madrid el único equipo de la máxima categoría que aún no ha registrado altas ni bajas (sólo los que no entraban en sus planes y han acabado contrato).

Algo que la contratación del delantero centro puede reactivar. De todas maneras, la paciencia es la principal receta con la que está operando el Málaga en la planificación de la próxima temporada. Y la necesidad de dar salidas es un hecho.