balonmano lCampeonato de Europa

A por los daneses

  • Una España experimental puede con Eslovenia, finaliza en la primera posición y se verá en las semifinales con Dinamarca

La selección española de balonmano se medirá mañana a Dinamarca en las semifinales del Europeo de Serbia tras imponerse por 35-32 a Eslovenia en un encuentro en el que ni las numerosas probaturas de Valero Rivera impidieron el triunfo. El técnico aprovechó para repartir minutos entre sus jugadores. Así, no sorprendió ver a Morros abandonar su demarcación en el centro de la defensa para atacar de pivote, un puesto mucho más natural para el alicantino, en el que también tuvo sus minutos Guardiola. Rivera quiso conceder el máximo descanso a Aginagalde y Alberto Entrerríos, que ni tan siquiera llegó a jugar.

Novedades continuas que penalizaron especialmente a la defensa española, que combinó momentos de solidez, su habitual línea en el campeonato, con otros en los que se notó la relajación que proporcionaba tener asegurada una plaza en las semifinales.

Una circunstancia que no impidió a España mantenerse viva en un marcador que Joan Cañellas, para el que parece que no hay partidos menores en este Europeo, dejó igualado al descanso (15-15) con un gol desde el extremo izquierdo.

Como tampoco pareció relajarse en ningún momento el extremo Luka Zvizej, ex jugador del Barcelona, que con cuatro goles casi consecutivos en el comienzo del segundo tiempo situó a Eslovenia con la máxima renta (17-21) del partido. Un momento clave para conocer si España deseaba evitar a Serbia, rival casi garantizado en semifinales si llegan a perder los españoles ayer.

Opción que pareció gustar al equipo español, que ocho minutos más tarde igualaba el marcador a 24 con un parcial de 7-3 en el que tuvo un papel destacado el central Raúl Entrerríos con dos soberbios latigazos. No tardó en deshacer la igualada la selección, guiada en ataque por Gurbindo, que tomó el relevo goleador al menor de los Entrerríos, y con una defensa cada vez más sólida, se situó con tres goles de ventaja (30-27) a cinco minutos para la conclusión.

Una ventaja que se encargó de conservar Joan Cañellas que certificó el triunfo (35-32) y una primera plaza del Grupo I que cruzará a España con Dinamarca en las semifinales, en una repetición de lo ocurrido hace un año en el Mundial de Suecia.

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