La malagueña Duane Rocha se vino ayer de Budapest con un bronce colgado al cuello y una sonrisa en la boca. No es para menos. Forma parte del capítulo de triunfadores de la expedición española en los Campeonatos de Europa de natación y confirma su recuperación después de pensarse seriamente abandonar la competición por no haber acudido a los Juegos de Pekín. Los Juegos son clave en la vida de cualquier deportista y obtener un billete para los que vienen es lo que persigue su prima, también nadadora. Carolina Furquim, del CN Fuengirola, lleva a cabo un plan de trabajo preolímpico que tiene como meta figurar entre los elegidos para Londres 2012. La vía materna de Carolina es la que le une con Duane. La primera, ahora de vacaciones en Brasilia (de donde es la familia, afincada desde hace años en Mijas), comenzó a dar sus primeras brazadas por imitar a la segunda. Una es promesa, otra realidad.

"A mitad de septiembre volverá al trabajo. Le programamos un plan y, de momento, está superando las cotas y cumpliendo con los resultados previstos. El objetivo a corto plazo es que vaya al próximo Campeonato de Europa junior y se acerque a las mínimas olímpicas. El ciclo lo tiene que completar yendo a los Juegos de Londres", afirma uno de sus técnicos, Iván Díez, encargado de su evolución junto con Javier Baena. No se asusta por su progresión. Hay que recordar que logró tres oros y una plata en los 50, 100, 200 y 400 metros libres, respectivamente, del Campeonato de España infantil de verano celebrado hace un mes en Mallorca y contribuyó sobremanera que a que su equipo copara la primera posición en la clasificación femenina. En el Nacional de categoría jóvenes y en los de invierno también brilló. "La sorpresa es moderada, ya que desde muy pequeña está desarrollando un trabajo prudente que va en línea ascendente", explica Díez.

No obstante, a día de hoy Furquim no puede representar a la selección nacional ni alcanzar los listones marcados. Su nacionalidad es brasileña y desde hace un año espera recibir la española. "Esperamos contar con ella en diciembre. La paradoja es que la mejor marca en 100 libres de 14 años en un Nacional infantil es suya, pero no está homologada", cuenta su técnico, que espera que recorra el camino previsto: "No dobla sesión de entrenamientos ni va a un Centro de Alto Rendimiento. Creemos que aún es joven para eso. No obstante, a pesar de las deficiencias, los resultados están ahí y las expectativas son altas. Su compañera Brenda [Lara Makin] ya va al Centro Acuático, pero nosotros preferimos que los dos años próximos los pase aquí. Así el Ayuntamiento nos podría ayudar con mejores infraestructuras, pues el club es joven y cuenta con otros nadadores muy prometedores".

Y es que, como precisa el preparador, Furquim, estudiante de 3º de ESO, aún se encuentra en fase de formación. "Todavía tiene hasta los 16 ó 17 años para especializarse, pero apunta a la mariposa y al croll. Para ser un buen nadador hay que ser completo", señala Díez. Rocha, por su parte, es consumada especialista en espalda. "Es que son muy diferentes en carácter y a la hora de nadar. De Carolina destaco su capacidad de trabajo. Si no logra el objetivo, sufre", apostilla.