El Málaga sólo había recibido tres goles esta temporada en Mestalla. Justo, una vuelta después, el equipo de Gracia volvió a encajar tres tantos el día que Kameni rompió su rachas de partidos completos en el conjunto blanquiazul. La lesión del camerunés, que no había empezado muy seguro el encuentro con un par de errores, dio paso a los primeros minutos de Ochoa en Liga y el mexicano no guardará buen recuerdo de su debut en el campeonato nacional español. Tres tantos en los que apenas pudo hacer nada.

El Málaga más irreconocible defensivamente, pese a contar con su línea de zagueros habitual y el centro del campo más sólido que tiene en la plantilla, logró sacar un valioso punto de Riazor gracias a la estrategia.

Recio sacó a relucir su excelente golpeo de balón para poner a los malaguistas dos veces por delante y para poder rescatar un punto cuando peor se había puesto la cosa para los de Javi Gracia, que había visto como el Deportivo le había volteado el marcador hasta en dos ocasiones.

Atsu y Chory dieron algo de velocidad a las bandas, pero el Málaga no terminó de encontrarse cómodo ante un Deportivo más mordedor que ladrador. Santa Cruz no tuvo mucha participación en el juego y los cambios no ofrecieron demasiado.