La Pelota de Papel

La rebeldía de todo un modesto

  • Un novel en la máxima categoría como el Eibar despierta el interés con su etiqueta de equipo trabajado. Hasta ocho jugadores permanecen de los que ascendieron de Segunda B.

Pocos hubieran apostado en agosto que transcurridas 14 jornadas el Eibar sería el noveno clasificado de Primera con 19 puntos, superando a Athletic y Real Sociedad, las dos potencias regionales. Ni siquiera la etiqueta de equipo bien trabajado que ya se ganó la pasada temporada le servía para aumentar su cotización en las casas de apuestas, pero los de Gaizka Garitano se han empeñado en demostrar que con orden e ilusión también se compite entre los grandes.

Hasta el nuevo entrenador de la Real Sociedad, el británico Davis Moyes, se apunta a la moda eibarresa, y el lunes presenció en la grada del vetusto Ipurúa esa goleada ante el Almería (5-2) que ha vuelto a colocar al equipo guipuzcoano en los telediarios.

Los méritos de Garitano y sus jugadores comienzan desde la disponibilidad económica. Con un presupuesto aprobado hace unos días de 15.830.000 euros para esta temporada -que multiplica por cuatro los 3,9 de los que dispuso en Segunda-, el Eibar se ha convertido en el símbolo de esa rebelión de los modestos que sucede cada temporada. Con un gasto en personal deportivo que no llega a nueve millones de euros -la partida principal del presupuesto-, el club incluso presentará superávit otro año más. Y es que la buena gestión no está reñida con el rendimiento deportivo, como bien debería aprender en otros lares.

Hasta ocho jugadores de la actual plantilla azulgrana han vivido en primera persona el ascenso desde el fútbol modesto al del imperio televisivo. El meta Irureta, los defensas Eneko Bóveda, Raúl Navas y Añibarro, los centrocampistas Errasti, Dani García y Capa y el delantero Arruabarrena ya formaron parte de aquel equipo que regresó a Segunda, y al que se añadieron Albentosa y Lillo, que ahora también permanecen en la plantilla.

La mayor parte de las novedades de la temporada aparecen en la zona atacante. Dani Nieto, Manu del Moral, Ángel Rodríguez, Piovaccari y Lekic se convirtieron en los refuerzos veraniegos para intentar dotar de mayor verticalidad el juego del equipo, aunque quizá está siendo Saúl Berjón, fichado a última hora tras el descenso administrativo del Murcia, quien está ofreciendo un mayor rendimiento.

Precisamente, Saúl fue uno de los protagonistas de la goleada ante el Almería y que provocó la destitución de Francisco. Curiosamente, la historia se repite. Hace poco más de un año, el 17 de noviembre de 2013, el Eibar venció por 6-0 al Real Madrid Castilla en Ipurúa, en la que fue la mayor goleada de Segunda División en la campaña 2013-2014. Entonces, al igual que ahora, la abultada derrota ante los guipuzcoanos también provocó la destitución del entonces técnico del filial madridista, Alberto Toril. A pesar del relevo en el banquillo, el filial acabó descendiendo a Segunda B, un aspecto que no dejará tranquilo a nadie en Almería.

Con cinco victorias y cuatro empates, el Eibar se ha situado en la zona media de la tabla, aunque llama la atención que ha obtenido más triunfos como visitante -tres- que como local -dos-, donde además ha recibido la mayor goleada con el 0-4 con el que le castigó el Real Madrid.

Un club más internacional

Pero 2014 no sólo será recordado por el ascenso a Primera, todo un acontecimiento para un club tan modesto, sino también por esa conversión en Sociedad Anónima Deportiva a la que lo obligaron pese a presentar unas saneadas cuentas. Finalmente, el proceso se cumplió a la perfección e incluso el Eibar consiguió que su imagen se llevase al exterior. Hasta 50 países distintos aparecen dentro de su panorama accionarial, con esas 10.000 personas que ayudaron a que el club pudiera llevar a cabo la obligada transformación. Las simpatías que siempre generó este modesto equipo de fútbol encontraron una respuesta en esa gente anónima que quiso que el sueño de ascender a Primera no chocase ante ese inesperado obstáculo.

Pese a todo, y aunque su buen trabajo ya lo coloca como futurible de otros banquillos con más aspiraciones, Gaizka Garitano es el primero en rebajar la euforia en torno a su equipo. Con 24 jornadas todavía por delante, el técnico no quiere que nadie baje la guardia, y sí que sus jugadores sigan exhibiendo esa solidaridad que está convirtiendo al Eibar en el mejor referente del fútbol modesto.

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