El mundillo brasileño del fútbol pasó cuatro días buscando candidatos para sustituir a Neymar y hoy, dos días después del desastre en Belo Horizonte, comienza a percibir qué poco interés ha dado a la búsqueda de un sucesor de Ronaldo, el mejor nueve en los últimos tiempos. El trono quedó vacío en el partido de los cuartos de final del Mundial de 2006 cuando un misil de Thierry Henry clasificó a los franceses y mandó a casa a la selección Canarinha que a Alemania llegó presumiendo de tener el título a la mano con la fórmula del Cuadrado Mágico de Ronaldo, Ronaldinho Gaucho, Adriano y Kaká.

Desde entonces han pasado ocho años de travesía por el desierto. Al Mundial de Sudáfrica Dunga llevó un plantilla que poco entusiasmaba por el brillo de sus nombres y mucho recordaba por el ruido de los sables a aquella selección de juego feo y dispuesta al choque de Italia'90 en la que despuntaba como jugador el que en 2010 se estrenaba como seleccionador.

En el rol del talentoso, del Neymar que acapara todos los flashes de las cámaras, se insinuaba hace cuatro años Kaká, pese a su lucha contra las lesiones que lo minaban desde su ruidosa llegada al Real Madrid. Y con la misión de tomar el testigo de Ronaldo llegó Robinho, pero tal fue la decepción del ex del Real Madrid y el Milán, que el protagonismo terminó sacándolo un hombre llamado a ser escudero, Luis Fabiano, y otro que por juventud creaba expectación, Nilmar. Luis Fabiano, quien fue ídolo en el Sevilla, terminó siendo el más destacado gracias a sus tres goles.

La verdeamarela cayó de nuevo en cuartos y la era Dunga acabó con más pena que gloria, arrastrando consigo a casi todos los convocados, salvo Julio César en el arco, los defensas Maicon, Daniel Alves, Thiago Silva, así como el volante Ramires, que fueron incluidos por Luiz Felipe Scolari en la aventura de Brasil 2014. Scolari apostó por Frederico Chaves Guedes, Fred, desde que con goles pagó el derecho de piso en la Copa Confederaciones del año pasado. Un doblete suyo despejó el camino hacia la conquista del título que se selló con una goleada por 3-0 sobre España. En total, marcó entonces cinco tantos.

Fred,  quien el 3 de octubre cumplirá 31 años, fue junto a Robinho reserva en el Mundial de Alemania 2006 de los consagrados Ronaldo y Adriano. Aun así, se dio el lujo de marcar un gol a Australia en la fase de grupos. Para la Copa del Mundo que termina este domingo, llegó como el nueve indiscutible. Y seis partidos después apenas puede mostrar un gol, a Camerún. Ni su desempeño discretísimo convenció a Scolari de dar más minutos de vuelo a Jo, por ejemplo.

A pesar de titular siempre, Hulk también pasó inadvertido y ante tanta sequía ofensiva las perversas bromas de los imponentes aficionados llegaron a cuestionar en las redes sociales por qué el técnico no daba oportunidad a Fuleco, la mascota del torneo. El gol de Miroslav Klose a los 23 minutos del partido que Alemania ganó por 1-7 aquél 8 de julio Negro no solo fue el del 0-2 parcial que ya presagiaba el desastre brasileño.

Unos metros arriba de la cancha del Mineiroa, con un traje impecable y en el rol de comentarista de televisión observaba impotente Ronaldo Luiz Nazario de Lima, el Fenómeno, el segundo goleador en la historia centenaria de la Canarinha con 62 goles en 98 partidos, quince menos que Pelé, que necesitó 92. Klose acababa de fijar con 16 una nueva marca para la historia de los goleadores de la Copa del Mundo, que el brasileño llegó a establecer con 15 en el Mundial del 2006. La escandalosa derrota de la Canarinha se encargó de minimizar la decepción personal y a Ronaldo, el que aún no tiene sucesor, apenas le restó exigir la victoria a los que jueguen por el tercer puesto este sábado, para paliar un poco la decepción por otro título que se hace esquivo al país del fútbol.