Balonmano Antequera

Sin sabor de boca copero

  • La resaca del partido ante Ciudad Real deja a un equipo que apenas pudo participar en el ambiente del torneo · La motivación parece haber desaparecido totalmente en el equipo

Parece que la temporada ha llegado a su fin. Y lo ha hecho antes de tiempo. Igual que la Copa del Rey, de la que el Antequera se ha ido sin apenas saborearla. Era su gran momento, pero partió ayer de Zaragoza antes de que se culminaran los cuartos de final, sin que hayan podido asistir a la fiesta de presentación y sin palpar en su totalidad el ambiente de una cita de estas características. Faltó algo. Ha sido un debut frío, coloreado, por encima de todo, por una gran afición.

La derrota fue clara. Y el viaje de vuelta duro. Muchas ilusiones se acabaron de un plumazo en la noche del miércoles. Para muchos, eran las últimas de la temporada: casi todos en el club piensan ya en el próximo año.

La sensación que ha dado el Balonmano Antequera en los últimos meses, precisamente desde la clasificación para la Copa del Rey, se hizo ayer mucho más intensa. Después de que el Ciudad Real eliminara a los de Antonio Carlos Ortega en los cuartos de final, la impresión es de que ya no hay para más. Punto y final. Y eso que aún quedan tres jornadas para que acabe un curso que será histórico para el club verdiblanco.

La resaca copera dejó a los jugadores con unas caras que mostraban seriedad, cansancio, falta de motivación. El viaje en AVE desde Zaragoza dibujó a un equipo que sabe que todo está prácticamente acabado. Que ya no tienen alicientes para seguir dejándose la piel en el campo.

Aunque, como en todo, hay varias excepciones. Dos son las más claras. El propio Ortega y el argentino Andrés Kogosvek. El técnico malagueño no comprende la actitud de su equipo. Él es un ganador nato y exige lo mismo. Pero se encuentra que en el campo sucede otra cosa. La desaparición de Rune Ohm de las convocatorias es un ejemplo de que hay quien no le sigue. "Debemos aspirar siempre a ganar. Hay que conseguir lo máximo porque no sabremos si volveremos a tener oportunidades de este tipo", afirmaba Ortega después del choque ante los de Dujshebaev.

El otro, el capitán verdiblanco, se identifica con su entrenador. "No me gusta perder a nada y menos de esta forma", asegura. Kogosvek es consciente de que el equipo no funciona desde hace tiempo, de que no hay la alegría de la primera vuelta. La prontitud con la que se supieron los descartes, algunos fichajes y las renovaciones para la próxima temporada también tienen que ver. Todos los jugadores supieron pronto cuál sería su futuro. Y en una liga tan igualada, la motivación es un factor clave. El propio Arrate lo demostró justo después del partido entre el Antequera y el Ciudad Real. Con oficio, lucha y una motivación espectacular, apabullaron a un Ademar de León que es tercero en la tabla clasificatoria y que se meterá casi con toda seguridad en la Liga de Campeones.

El único objetivo ahora es recuperar la octava plaza. Pero llegan Valladolid y CAI Aragón. Y muchos equipos optan a ella. La temporada aún no acabó. ¿O sí?

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