Fútbol l Liga de Campeones

Una sombra de sí mismo

  • El Barcelona, con un fútbol espeso y previsible, cae ante el sorprendente Rubin Kazan

El modesto Rubin Kazan ruso dio la gran sorpresa de la jornada al vencer al Barcelona, actual campeón de Europa, que acusó la melancolía de Lionel Messi y la falta de ideas a nivel colectivo. Ryazantsev adelantó a los visitantes al comienzo del partido y Zlatan Ibrahimovic igualó a los 48 minutos. Pero el turco Karadeniz le dio la vuelta al resultado en el 73 al culminar un espectacular contraataque.

El campeón de Europa se complicó notablemente sus aspiraciones en la Liga de Campeones porque el Grupo F queda totalmente abierto. Y al Barcelona le restan dos partidos fuera de casa y jugará como local ante el Inter . El Barcelona fue una sombra de sí mismo durante todo el encuentro, en el que nunca se sintió cómodo. El Rubin Kazan aposentó su plan de defender y salir al contraataque con un gol a los 90 segundos.

El mejicano Rafa Márquez recuperó su puesto como titular en el centro de la zaga azulgrana y no pudo comenzar peor, puesto que regaló un balón para que Ryazantsev lanzara un misil lejano que sorprendió a Víctor Valdés. El estadio se quedó sin habla. Los 55.000 espectadores que desafiaron la fría noche de Barcelona apenas se creyeron lo que vieron.

Y su sorpresa se acrecentó con el paso de los minutos, pues el Barcelona nunca entró en ritmo. Messi continuó desaparecido, Ibrahimovic fue una estatua en la punta, Daniel Alves jugó acelerado y Xavi no encontró el balón. Pero, sobre todo, el Barcelona echó de menos los desmarques, el movimiento continuo de sus jugadores, por lo que su juego se hizo previsible y fácil de defender.

Ryzhikov, el portero visitante, vivió plácidamente. Si acaso, se inquietó ligeramente con un disparo potente de Daniel Alves que salió cerca de su palo izquierdo. Pero poco más. Mientras, el argentino Alejandro El chori Domínguez gobernó el encuentro desde la mediapunta, confirmando todo lo bueno que se habla de él. Es un futbolista que termina contrato el 31 de diciembre y seguramente no le van a faltar ofertas.

La historia pareció cambiar con el inicio de la segunda parte. Xavi dibujó un pase firma de la casa a Ibrahimovic y el sueco bajó el balón con el pecho para inventarse un magnífico disparo cruzado, digno de su categoría. Buenos augurios para los locales después de su prolongado atasco. Pero no. Porque el Barcelona volvió a atascarse en un millar de pases sin profundidad. No fue el Barcelona que deslumbró la pasada temporada, ni mucho menos.

A todo ello contribuye el actual momento de Messi, quien parece no haberse recuperado del cansancio físico y mental sufrido con Argentina. Messi fue ayer el de la selección albiceleste. Se pensó que el Rubin Kazan iba a acusar el paso de los minutos, pero ni de lejos. El conjunto ruso siempre anduvo con gasolina, y así lo demostró a los 73 minutos, cuando congeló el Camp Nou. El Barcelona perdió un balón y Domínguez montó un contraataque fulminante. Puso un gran balón sobre la carrera de Karadeniz y el punta conectó un disparo potente sobre la desesperada salida de Valdés.

Josep Guardiola, el técnico del Barcelona, puso toda la dinamita que le quedó en ataque, pero lo único que hizo fue acumular mucha gente arriba. Ni siquiera tuvo fortuna, puesto que Ibrahimovic y Toure Yaya estrellaron sendos balones en los palos, uno en el tiempo de descuento. Y así se consumó una de las grandes sorpresas de la temporada, la primera derrota del Barcelona esta campaña.

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