Toda pretemporada, por muy larga y pesada que se haga, tiene su punto y final. Y la del Unicaja termina hoy. Después, sólo habrá tiempo para realizar un par de entrenamientos y desplazarse a Zaragoza, lugar de buen recuerdo donde el equipo malagueño iniciará el domingo su caminar por la temporada 2010/11. Lo agradece la afición, ávida más que nunca de baloncesto por no haber podido ver esta vez ningún amistoso en la ciudad durante la pretemporada, pero sobre todo lo agradecen los jugadores. Las palabras de Carlos Jiménez en la información adjunta reflejan el sentir del vestuario a estas alturas. Hay ganas de competir.

Hoy, en la localidad barcelonesa de Moncada, tendrá el equipo de Aíto García Reneses la última prueba para calibrar su estado de forma antes de la hora de la verdad. Será a las 18:00 frente al Estrella Roja de Belgrado. Nunca es del todo fiable una cita amistosa, pero sí vale para dejarse llevar por las sensaciones y prever comportamientos futuros. Hasta ahora, las transmitidas por el equipo malagueño tienden más hacia el optimismo.

Las cinco victorias en los siete amistosos disputados (Tíjola, Estudiantes, Granada, Cajasol y Lleida) han dejado patente que el trabajo preparatorio está avanzado, mucho más que el año pasado, como producto de la facilidad que ha tenido Aíto para disponer de su plantilla desde finales del mes de agosto y de la ausencia de lesiones. Hay mayor sincronía entre los jugadores, y eso siempre es una ventaja.

Pero, evidentemente, hay deberes y cosas que corregir. Defensivamente, por ejemplo, aspecto en el que Aíto no incidió demasiado antes de desplazarse con el equipo a Viella. Hoy será una buena ocasión para comprobar los progresos. Y están los nuevos, cuyos problemas de adaptación, más allá del periodo de aproximación y conocimiento de compañeros y estilo de juego en el que se encuentra inmerso Terrell McIntyre, parecen recaer especialmente sobre las espaldas de Panchi Barrera, a día de hoy la mayor incógnita de la plantilla malagueña.

El rival del último ensayo es un histórico del baloncesto serbio y europeo. Su camiseta la han llevado jugadores como Drazen Dalipagic, Milan Gurovic, Vladimir Radmanovic, Igor Rakocevic o Predrag Stojakovic, aunque ahora no atraviesa por su mejor momento. Jahmar Young, Lazar Radosavljevic y Strahinja Milosevic son sus referentes. Será el último sparring. El CAI, el domingo, será ya un contrincante real.