Con una hora de demora por niebla, comenzó, en el Augusta National, el Torneo de Maestros, primer eslabón del Grand Slam de golf, que dejó tras la primera ronda a dos punteros: el inglés Justin Rose y el Sudafricano Trevor Immelman.

Ambos jugadores hicieron 68 golpes (cuatro bajo el par) y dejaron en claro que el certamen puede ser dominado por el grupo de diez jugadores menores de 30 años de edad, que participan en esta edición del Masters y que buscan su primera victoria en un Major.

Los candidatos a ganar el certamen, el número uno del mundo Tiger Woods y el número dos Phil Mickelson, tuvieron un comienzo bastante discreto. Woods arrancó la vuelta muy cauteloso, haciendo todos los hoyos en par hasta el 12 y fallando mucho arriba del green. En el 13 subió el Par 5 y en el 14 hizo otro bogey. Su único birdie del día llegó en el hoyo 15, pero no fue suficiente para revertir la pálida imagen del comienzo.

Ángel Cabrera, a quien la organización del Masters lo puso a jugar con Tiger los dos primeros días como una manera de mantener presente la definición que ambos sostuvieron en el último US Open, tampoco anduvo muy preciso, aunque no se mostró tan disconforme con su comienzo: 73 golpes.

A diferencia de Tiger Woods, el comienzo de Phil Mickelson fue explosivo. Embocó desde afuera del green en el 1 para birdie. Luego volvió a bajar en el 2 y, si bien anduvo con algunos tropiezos al promediar la vuelta, cerró con 71 impactos para igualar la undécima posición.

Para los españoles, la jornada quedó para el olvido. José María Olazabal y Sergio García hicieron 76 golpes; mientras que Miguel Ángel Jiménez presentó una tarjeta de 77 golpes. Los tres están en peligro de fallar el corte clasificatorio de hoy. Si bien los resultados previos de los tres eran bastante magros, nadie esperaba un comienzo tan desalentador, de los peores en los últimos años para los jugadores españoles.

El defensor del título Zach Jonson tuvo un buen debut, haciendo 70 golpes e igualando la sexta posición con Jim Furyk, Robert Karlsson e Ian Poulter, quien en la jornada de ayer logró hoyo en uno en el Par 3 del 16.

A un golpe de los líderes, con 68 golpes, se ubican el experimentado Lee Westwood y los desconocidos Bateman y Snedeker.

El campo se está jugando más larga que en años anteriores, según la mayoría de los jugadores, pero el clima parece ser favorable para los próximos días, a diferencia del año pasado, en donde las bajas temperaturas llevaron a que el score del campeón fuera de uno sobre el par de la cancha, algo que sólo dos veces había sucedido en el Masters (1954 y 1956).