Todavía con el regusto amargo por la dolorosa goleada encajada en el Vicente Calderón, el vestuario del Málaga hizo ayer un ejercicio de autocrítica y lamentó los errores que se cometieron ante el Atlético de Madrid. El más claro de todos fue Baha: "En esta categoría no se puede fallar ningún pase, sobre todo cuando juegas contra un equipo como el Atlético de Madrid. En cualquier fallo te marcan un gol".

El delantero franco marroquí, que ayer comenzó el ramadán, rehusó polemizar con Tapia por la posición que ocupa en su esquema táctico: "El año pasado también estaba solo en algunos partidos en ataque. Este año será más difícil y habrá que acostumbrarse al nivel de la categoría".

La reflexión del delantero franco marroquí es compartida por el resto de los jugadores del vestuario, que también reconocieron que el equipo cometió demasiados errores. "En Primera los pequeños detalles deciden un partido, la calidad es enorme y cualquier fallo defensivo o táctico te supone un gol. Hay que pensar que eso va a ocurrir en los 37 partidos que restan. Está claro que tenemos que corregir cosas y que no estuvimos finos en el Calderón. Hemos hablado para intentar mejorar de cara a los próximos partidos", dijo Arnau, que el domingo regresó a la titularidad del equipo tras un año y medio de suplencia.

A pesar de la goleada, el meta catalán firmó un gran partido en el Calderón e impedió que el resultado fuera aún más abultado. No obstante, Arnau reconoció que en el primer gol de Forlán pudo haber hecho algo más: "Es cierto que el balón entra en el palo corto, pero ya no se puede hacer nada".