Air Europa ha anunciado que aplicará una subida cercana al 10% en todas sus tarifas debido al encarecimiento de los carburantes. A la medida adelantada por la compañía con sede en Palma de Mallorca también se sumará Spanair, que anunció ayer que elevará el recargo por combustible en sus billetes.

En concreto, la subida de Spanair se materializará en cinco euros extra por trayecto y afectará a todas las tarifas de la compañía, a excepción de los vuelos a Canarias y Baleares. Actualmente, la aerolínea ya cobra 22 euros de recargo por carburante en los trayectos domésticos y en el extranjero, si bien el recargo por volar a Argelia se sitúa en 13 euros y 30 si el desplazamiento es a Gambia.

La mayoría de las principales compañías aéreas están aplicando leves incrementos en los precios de los pasajes, con el fin de compensar el alza del precio del barril del crudo. Fuentes de Air Europa recuerdan que la subida récord del crudo está afectando, sobre todo, a las cuentas de las compañías estadounidenses, obligadas a comprar el carburante en dólares. Dicho de otro modo, la fortaleza del euro frente a la divisa norteamericana está evitando que los recargos aplicados por el sector en España sean mayores.

El director general de Air Berlín en España y Portugal, Álvaro Middelmann, reconoce que "se producirá un aumento de precios como se está dando en otros segmentos de la economía". No obstante, se ha mostrado confiado en que "los vuelos baratos no desaparecerán".

Por su parte, el director general de Air France-KLM, Jean-Cyril Spinetta, defendió ayer el principio que rige el sistema de intercambio de permisos de emisión (ETS) para luchar contra el cambio climático, pero reclamó una aplicación "justa" para evitar penalizar a las aerolíneas europeas.

"Hemos pedido desde el principio que la integración del sector aéreo en este mecanismo se haga de manea progresiva, pragmática y realista", puso de relieve Spinetta. Eso quiere decir, a su juicio, que el sistema debe imponerse a todos los vuelos europeos "sea cual sea el origen del operador". De lo contrario, se producirán desvíos en las rutas aéreas, algo que la industria ve "con preocupación".