La Cooperativa Agroganadera del Valle de los Pedroches (Covap) celebró ayer sus XX Jornadas Técnicas en la localidad cordobesa de Pozoblanco, en la que se constató la "preocupación" por la situación actual del sector. El presidente de Covap, Ricardo Delgado Vizcaíno, señaló en su intervención que han desparecido muchas explotaciones de ibérico y lamentó que la desilusión de muchos ganaderos por la confusión, la disminución de la demanda, la caída de los precios y el coste de piensos y materias primas.

En la cita quedaron patentes las diferencias entre los productores de ibérico puro de bellota y el ibérico de cebo. No obstante, ambas partes coincidieron en que la Norma de Calidad que prepara el Gobierno debe ser más clara, según Antonio Muñoz Luna, catedrático de Producción Animal de la Universidad de Murcia (defensor del ibérico de cebo) y José Luis García-Palacios, presidente de Asaja Huelva y portavoz del ibérico puro de bellota. Muñoz Luna aclaró que el último borrador "no satisface a nadie", ya que se quiere meter en la misma vasija agua con aceite y evidentemente no se puede comparar un ibérico de bellota con un ibérico de cebo. "Es absurdo intentar meter en la misma norma dos cosas que nada tienen que ver", afirmó.

Por su parte, García-Palacios subrayó que la norma "ha de ser transparente y sencilla", y recordó que llos engaños y fraudes han derivado en "la peor crisis de la historia" del cerdo ibérico, subrayando incluso que ni siquiera la peste africana sacudió con tanta fuerza a los productores, que sufren las consecuencias de una oferta desmesurada y unos precios de mercado que generan "la ruina".

El sector lácteo fue otro de los puntos centrales de las jornadas. El presidente de Covap incidió en que es necesario llegar a acuerdos en los precios, ya que los incrementos de los costes de las materias primas, unidos al bajo precio de la leche -utilizada como reclamo- está llevando a la desesperación al ganadero. Pidió una subida en el precio de leche, ya que "una subida de cinco céntimos en un litro de leche representa poco más de cuatro euros por consumidor y año, lo que significaría para el ganadero medio mantener viva su explotación. Delgado Vizcaíno admitió que hay que organizarse, pero no para ir contra la industria y contra la distribución, sino para con ellas alcanzar el deseado equilibrio de la cadena alimentaria.