Las antiguas bodegas Domecq afrontan el comienzo de una nueva era. Andrew L. Tan aterrizó ayer en Jerez con el contrato de compra de la firma bodeguera jerezana bajo el brazo. El magnate filipino tomó posesión de la nueva filial jerezana del Grupo Emperador -mayor productor mundial de brandy con unas ventas de 33 millones de cajas-, que a partir de ahora operará en los mercados como Bodegas Fundador.

Tras el acuerdo apalabrado en diciembre con la japonesa Beam Suntory, Tan firmó el lunes en Madrid la compra por 275 millones de euros, contrato que consagra el cambio de titularidad de las bodegas y viñedos de la antigua Domecq en Jerez, las marcas Fundador, Tres Cepas, Terry y Harveys, así como sus destilerías en Tomelloso. El propietario del grupo filipino cumple así el sueño de incorporar a su portfolio el brandy Fundador. Su meta es "devolver la gloria, el éxito y el posicionamiento" al decano de los brandies españoles para convertirlo "en una marca global".