Juan Vaz, socio del departamento Laboral de Garrigues, defendió en la sesión de RH Club que "uno de los efectos inevitables que está produciendo la crisis es el que se refiere a la dimensión de las plantillas".

Para Vaz, hasta ahora, la reestructuración del personal se ha venido produciendo principalmente mediante extinciones individuales de contratos, primero prescindiendo de los temporales y luego extinguiendo los fijos de manera no colectiva.

Durante la sesión, el experto también reflexionó sobre aspectos clave como "la flexibilidad, el control, el esfuerzo financiero, las medidas sectoriales, el control de coste, la imagen y la comunicación", como elementos a tener presentes de forma planificada ante la posibilidad de afrontar medidas laborales.

Sin embargo, indicó, llega un momento en el que las medidas que debe adoptar la empresa para mejorar su situación o incluso por propia supervivencia deben planificarse de forma distinta a la mera extinción individual y sucesiva de contratos de trabajo.

Sobre esta premisa, se analizaron fórmulas legales y organizativas que permitirían ajustar de manera temporal los costes de personal sin necesidad de acudir a medidas traumáticas de extinción. La conclusión alcanzada permite afirmar que existen mecanismos al alcance de los empresarios, distintos a la extinción de contratos, que de manera razonable pueden ayudar a salvar la situación deficitaria o negativa de las empresas.