Inmobiliaria del Sur (Insur) sacó ayer pecho ante los inversores bursátiles con una presentación en la que mostró la solidez financiera de su negocio. Ricardo Pumar, presidente de la compañía sevillana fundada en 1945, aseguró que la compañía dispone de una amplia capacidad de recursos para superar la actual caída de la actividad en el sector y seguir creciendo. Acerca de las previsiones económicas, detalló que prevé obtener este año el mismo beneficio neto que en 2007, en torno a 25 millones de euros.

El directivo aseguró que Insur podría disponer de créditos por un importe de hasta 400 millones de euros gracias a su saneado balance. A cierre del pasado año, la deuda neta era de 177 millones.

Junto a esta capacidad de endeudamiento adicional, Insur ha cuantificado el importe de las plusvalías latentes que acumulan todos los activos que posee. Este término define al beneficio bruto que obtendría la empresa si vendiera esos activos a precio de mercado en relación al coste que le supusieron en el momento de construirlos o adquirirlos. El valor de mercado es de 877 millones, en los que se incluyen plusvalías de 534 millones.

En la actualidad, Inmobiliaria del Sur cuenta con más de 100.000 metros cuadrados de activos en explotación, además de 1.600 plazas de aparcamiento.

Ante el actual escenario, la estrategia de la inmobiliaria pasa por seguir apostando por la actividad patrimonial y por diversificar hacia nuevos mercados y activos, como son los centros logísticos, y la vuelta a la construcción de viviendas de protección oficial (VPO). La compañía incluso sopesa intensificar su internacionalización, ya iniciada en Lisboa.