La actual desaceleración económica es, al mismo tiempo, una coyuntura propicia para el desarrollo de ciertas actividades. Por ejemplo, la gestión de instalaciones de generación eléctrica asociadas a plantas industriales, segmento en el que la compañía NeoElectra, nacida en 2003 en Francia y con sede en Barcelona, se está especializando. Esta firma ya tiene 112 megavatios en instalaciones de cogeneración en toda España, de los que 36 están repartidos por cinco plantas en las provincias de Sevilla y Jaén adquiridas en marzo a Aldesa por 12 millones de euros.

Antonio J. B. Cortés, consejero delegado de NeoElectra, explicó ayer en Sevilla que los planes de la firma pasan por invertir al menos otros 50 millones durante los dos próximos años en la comunidad, sobre un total de 250 en toda España. Este desembolso se destinará al mismo tipo de activos que los ya adquiridos y con una estrategia "de continuidad en el negocio y alejada de toda actitud especulativa", según Cortés. Desde 2005, NeoElectra ha invertido 90 millones en nuestro país.

La firma, según estos directivos, mejora la eficiencia de estas plantas y logra reducir así el coste energético de las industrias a las que están asociadas, al tiempo que NeoElectra vende la electricidad sobrante. En 2007, la firma facturó 154 millones (60 en España) y logró un beneficio bruto de explotación de 49,7. Junto a la energía, también posee una división de almacenamiento y venta de dióxido de carbono para usos alimentarios (bebidas con gas), bajo la marca Carboneco, y otra de producción de caviar.

El plan de expansión, al que hay que sumar otros 350 millones previstos en Francia, se encamina a preparara al grupo para su salida a Bolsa en Londres o Madrid en 2010, según Cortés.