El Grupo Renfe ha acordado con los sindicatos  (UGT, Renfe y el sindicato de maquinistas Semaf) solicitar "la tasa de reposición máxima permitida para  las entidades públicas empresariales y sociedades mercantiles estatales para poder desarrollar en los primeros meses de 2023 las correspondientes Ofertas de Empleo Público (OEP) para todos los colectivos". Con ellos se consolidará del empleo.

Asimismo, el Grupo Renfe solicitará "las plazas que fueran necesarias para garantizar para el ejercicio 2023 un volumen total de plazas en el colectivo comercial en el entorno al número de contrataciones temporales que existen actualmente en este colectivo".

Se trata de medidas encaminadas a mantener la calidad en el servicio, según consta en el acta de la reunión mantenida este miércoles entre directivos del Grupo Renfe y los portavoces de los trabajadores a la que ha tenido acceso la edición digital de este periódico.

La medida más destacada de este acuerdo es el compromiso de la empresa pública de avanzar para la negociación del convenio colectivo bloqueado desde abril.

Una plantilla sobrecargada y envejecida

La falta de personal en Renfe está motivada, entre otras causas, por una tasa de reposición que inadecuada en las plantillas. Esta situación empeorará a largo plazo: Según fuentes sindicales, la edad media de los trabajadores en Renfe gira en torno a los 55 años de modo que en el plazo de un lustro se estima que hasta el 75% de la plantilla se jubilará. 

El déficit en las plantillas tiene más consecuencias: La falta de personal provoca que los puestos de categoría de ingreso en la empresa asciendan de categoría al poco tiempo dejando estos puestos de las bases sin el personal necesario, lo cual sobrecarga a otros perfiles.

Además, el problema de las plantillas deficitarias incide en la externalización de servicios (desde la atención al cliente hasta talleres) a través de subcontratas. Los trabajadores en estas empresas externas soportan unas condiciones laborales infinitamente peor que las que tienen en Renfe, como ya denunciaron las centrales.

Desconvocadas las huelgas

El acuerdo entre los directivos de Grupo Renfe y los portavoces de los trabajadores ha permitido desconvocar el calendario de huelga previsto en el ámbito nacional.

Entre otros puntos del acuerdo destacan el incremento salarial del 3,5% para los trabajadores de Renfe con efectos desde el 1 de enero de 2022 y la reducción de los periodos de permanencia en las categorías de ingreso a la empresa pública.

Otra medida se refiere a la incorporación de la figura de maquinista instructor para agilizar y facilitar la formación del colectivo de conducción; y su incorporación a los cuadros de servicio "lo antes posible", compartiendo esta función en los mandos intermedios.

La mesa de negociación del III Convenio Colectivo de Renfe analizará también el sistema de promoción a los mandos intermedios supervisores de base y/o sección, así como a mando intermedio supervisor de trenes y/o estaciones para garantizar la cobertura de las plazas vacantes.

El Grupo Renfe se compromete también a desarrollar, con los sindicatos, la especialización y fidelización fomentando experiencia y formación.

En el marco del convenio colectivo, las partes también han acordado analizar la reorganización y condiciones de trabajo en el marco de la transformación digital, las nuevas tecnologías y los avances tecnológicos.

Prórroga de los contratos en atención al cliente

La dirección de la empresa pública se ha comprometido también a prorrogar los contratos temporales que se firmaron desde que se estableció en septiembre la gratuidad de los títulos multiviaje en los servicios ferroviarios de Cercanías, Rodalíes y Media Distancia. Esta medida, que se ha extendido para todo el año 2023, promovió la contratación temporal de unos 500 trabajadores. 

La dirección de la empresa, en línea con esta medida, "va a realizar en un primer impulso las gestiones correspondientes para prorrogar la contratación temporal de dichas personas hasta la vigencia máxima que el Real Decreto ley 32/2021".