Economía

Skylife, la revelación de la aeronáutica andaluza

  • Con dos años de vida, la ingeniería sevillana trabaja para gigantes como EADS, Boeing y Bombardier Su área, la aviónica, la coloca ante un futuro prometedor

Con tan sólo dos años de vida, Skylife Engineering se ha convertido en la empresarevelación del panorama aeronáutico andaluz. Nacida en el seno de la Universidad de Sevilla de la mano de un puñado de ingenieros constituye una esperanza para el sector por dos motivos: se centra en uno de los segmentos con más futuro de la industria aeroespacial, la aviónica -sistemas electrónicos que se embarcan en un avión-, y su seriedad, tecnología y experiencia le han granjeado el apoyo de los principales fabricantes del mundo, EADS, Boeing y Bombardier.

Con esta carta de presentación, es fácil atisbar el crecimiento exponencial al que se enfrenta. Las previsiones marean. Si bien su actual facturación es bastante modesta, pues cerró 2012 con un negocio de en torno a 100.000 euros, esta spin off de base tecnológica estima que, en el peor de los casos, quintuplicará aquel volumen este año, mientras que, si se adjudica todos los proyectos que tiene entre manos, logrará multiplicarlo por diez, hasta llegar al millón de euros a finales de 2013.

Pero, ¿por qué tiene tanto prestigio y proyección esta joven firma? Porque Skylife no es una aventura que surja de la nada. Todo lo contrario. La avalan los más de 10 años de éxitos cosechados por sus impulsores, ingenieros que han trabajado al más alto nivel desde un grupo de investigación de la Universidad de Sevilla (Grupo de Tecnología Electrónica TIC-109). De este equipo de 15 ingenieros aeronáuticos, industriales, informáticos y físicos, ya son 11 los que trabajan en Skylife, cuatro de ellos como socios promotores y el resto como empleados.

"Como grupo hemos desarrollado más de 22 proyectos aeronáuticos para constructores de la talla de Airbus o Boeing sin fallar ni una sola vez, finalizando los trabajos en plazo, con la máxima calidad y a un precio muy reducido", subraya María Ángeles Martín, principal promotora y directora gerente de Skylife Engineering. De ahí que se hayan ganado el respeto del sector y que fueran los propios gigantes aeroespaciales los que demandaran su constitución como empresa. "Hace 10 años hacíamos pequeñas tareas para ellos y la cadena de intermediarios era muy larga, sin embargo, hoy estamos en primera línea y somos proveedores directos, lo que representa todo un espaldarazo a nuestra actividad", añade Martín.

No hay nada más que echar un vistazo a su lista de trabajos para apreciar la evolución. Recién creada Skylife, en 2011, lograron adjudicarse proyectos con Boeing, Aertec o Green Power, mientras que es más reciente la firma de un contrato con EADS -uno de sus grandes objetivos, dado que como grupo de investigación ya habían trabajado con la compañía- y están a punto de cerrar otros con Boeing y Bombardier.

"Desde diciembre pasado somos proveedores directos de EADS", se congratula Martín. El contrato firmado con el consorcio europeo se divide en varias fases. La que se ha abordado hasta el momento se centra en la mejora de los bancos de pruebas del avión militar A400M, que se monta en Sevilla. Los trabajos que se realizarán a lo largo de éste y el próximo año aún se están definiendo, aunque todo apunta a que se seguirán mejorando las pruebas funcionales de aquel aparato y, además, se abordarán tareas centradas en la integración de sistemas, por la gran experiencia de Skylife en electrónica de potencia.

Por otra parte, la ingeniería sevillana se encuentra en estos momentos cerrando el importe de un nuevo contrato con la estadounidense Boeing, centrado en el desarrollo de la aviónica integrada en sus aviones no tripulados (UAV).

Asimismo, y dentro de sus planes de expansión internacional, Skylife acometerá a partir de septiembre un proyecto de investigación en Canadá, de la mano de Bombardier. "Seremos la primera empresa española que entra en un programa en el que todas las compañías hasta ahora eran norteamericanas, canadienses y francesas", explica Martín. El estudio, que se prolongará durante dos años, persigue la sustitución de sistemas mecánicos, hidráulicos y neumáticos por sistemas eléctricos controlados electrónicamente. De esta forma, éste se podría convertir en el primer paso de Skylife para poner una pica fuera de España. Canadá está en su quiniela exterior, aunque también Italia.

Pero los proyectos de la spin off sevillana no se quedan ahí. Y es que se plantea dar un gran salto: pasar de diseñar y desarrollar equipos a medida a adentrarse en la producción en serie de esos sistemas. "Tenemos los productos y los clientes, así que ¿por qué transferir nuestros conocimientos a terceros para que ellos fabriquen los sistemas? Queremos quedarnos con la alta tecnología y con la producción para generar riqueza y empleo aquí, en Andalucía", sentencia Martín.

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