El Tesoro Español adjudicó hoy 3.507 millones de euros en bonos a tres y cinco años con menor interés que el aplicado en las anteriores pujas de estas denominaciones.

Así, el Tesoro colocó 1.893,34 millones de euros en bonos a tres años con un interés marginal del 3,297 %, cinco décimas por debajo del que se aplicó (3,797 %) en la anterior subasta de bonos a tres años, celebrada en diciembre. Por lo que respecta a los bonos a cinco años, se adjudicaron hoy 1.613 millones con una rentabilidad del 4,08 %, también inferior al 4,59 % precedente.

Tal y como viene ocurriendo en las subastas que ha celebrado el Tesoro español en los últimos meses, la demanda -cerca de 6.600 millones de euros- ha superado ampliamente el importe inicialmente previsto, que oscilaba entre los 3.000 y los 4.000 millones de euros. Tras varios meses en los que el Estado español se vio obligado a pagar cada vez más por sus emisiones de deuda, las últimas medidas aprobadas por el Gobierno para culminar la reestructuración del sistema financiero -en particular las fusiones de cajas de ahorros- han logrado devolver cierta confianza a los mercados.

En esta recuperación de la confianza influye las últimas medidas acordadas para el sistema de pensiones, los pasos anunciados en la reestructuración del sistema financiero y el informe favorable de Standard & Poors, que aunque mantuvo el lunes inalterada en AA la calificación de la deuda española a largo plazo, destacó el esfuerzo continuado y el impulso que el Gobierno ha mostrado para hacer frente a los desafíos económicos.

Prueba de ello es la prima de riesgo país de España, que se mide con el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, que llegaba a rozar los 300 puntos básicos el año pasado y que se sitúa ahora en torno a los 180. La próxima cita del Tesoro español con los mercados será el próximo 15 de febrero, con la emisión de letras a 12 y 18 meses.