El Gobierno ha aprobado este martes el derecho a paro de las empleadas del hogar, que a partir de octubre podrán recibir una prestación por desempleo.

Los contratantes tendrán que hacerse cargo del aumento de las cotizaciones, algo que repercutirá directamente en el bolsillo de los empleadores que, aunque el Ejecutivo ha aprobado una bonificación para aliviar el peso de las cotizaciones en las familias esta no será del 100%. La bonificación será del 80% de la aportación de la familia a la cotización por desempleo por ello el coste de tener una empleada del hogar aumentará conforme lo haga su sueldo. 

También se mantiene la reducción de un 20% en la aportación empresarial a la cotización por contingencias comunes correspondiente a este Sistema Especial donde se podrán incrementar los tramos de bonificaciones superiores al 20% según las condiciones del hogar.

Con ambas bonificaciones no se cubre el aumento de las cuotas y la cantidad a abonar es mayor conforme sube el salario de la empleada. Según los cálculos de El Independiente, si una empleada cobra 300 euros al mes, los contratantes tenían que abonar 95 euros para que se pudiera dar de baja en caso de accidente pero ahora esta cantidad ha subido 10 euros situándose e 105 euros al mes por empleada.

Si la persona contratada gana 800 euros al mes antes se debía abonar 207 euros por la trabajadora pero esta cantidad ha subido a 22 euros más para la cotización. En el caso de que gane 2.000 euros mensuales la cantidad es de 54€ más al mes.

¿Cuáles son las ventajas para las empleadas del hogar?

Las empleadas del hogar y cuidadoras de mayores y niños tiene que cotizar de manera obligatoria ya que hasta ahora este colectivo se encontraba en riesgo de exclusión sin ningún tipo de protección en situación de desempleo dejando discriminadas a este sector con más de 370.00 trabajadoras afiliadas al Sistema Oficial de Empeladas del Hogar. 

Además, esta medida trae otras ventajas que protegerán a este sector, por ejemplo, si el contratante se declara insolvente el Fondo de Garantía Social (Fogasa) se hará cargo de las prestaciones y tampoco se podrán realizar despidos sin alegar causa.

Aunque el coste de tener una empleada del hogar aumentará, lo hará con ello su nivel de vida, teniendo el derecho de una prestación por desempleo, al igual que el resto de los trabajadores en España.