Los miles de ciudadanos que acudirán este domingo a las urnas lo harán con una imagen clara en sus retinas: un río Guadalmedina embovedado. Éste es el elemento central del proyecto de intervención sobre el cauce urbano diseñado por el Partido Popular en su programa electoral y que ayer, el último día de la campaña, puso sobre la mesa su candidato a la reelección, Francisco de la Torre. Las infografías elaboradas, según los responsables populares por creativos de Nuevas Generaciones, muestran una parte de la traza del río completamente cubierta, sobre la que se observan espacios peatonales y ajardinados, en superficie, y el paso del agua y sendos túneles para tráfico y el paso del tren, por abajo.

Ésta es una de las opciones que ayer mostró públicamente De la Torre ante los medios de comunicación en un asunto en el que existe un doble lenguaje. ¿Por qué se cierra la campaña con un tema que el propio candidato pidió que quedase fuera de la misma? ¿Por qué muestra su idea de la actuación cuando al tiempo dice que habrá de ser respetuoso con la decisión que se adopte en el concurso de ideas que convoque la Fundación Ciedes? ¿Por qué afirma que está abierto a todas las ideas cuando invalida las de sus contrincantes en las urnas, María Gámez y Pedro Moreno Brenes, que hablan de un parque fluvial?

Son algunos de los interrogantes que surgen después de que el alcaldable optase por dejar para última hora un asunto que, como él mismo apunta, habrá de aunar las posiciones de todas las administraciones públicas. Sobre ello, el regidor explicó que ha tomado esta decisión para responder a aquellos que dicen que su propuesta "es gris". Pero no se limitó a defender su idea con respecto a otras alternativas, sino que fue a más al punto de considerar inviable lo expuesto por la candidata socialista.

"Se convertiría en un obstáculo, que dificultaría el paso de los 600 metros cúbicos por segundo", dijo, a lo que añadió: "Si tiene árboles, serían arrastrados por la avenida y llevados contra los puentes, que es lo que pasó en la Málaga de 1907". Una fecha de infausto recuerdo para todos los malagueños, puesto que la riada que padeció la urbe en septiembre de ese año se llevó por delante la vida de una veintena de personas, y que el regidor vinculó con la propuesta de Gámez. En este sentido, agregó que para evitar una situación semejante, "lo más que podría haber es césped, para que el agua resbale bien y no retenga, pero no se puede poner ni un rosal ni una zona de juego".

Llama igualmente la atención que el propio programa popular, como bien comentó De la Torre, únicamente hable de aprovechar los próximos cuatro años de mandato municipal, si así lo determinan los ciudadanos, para elaborar los estudios necesarios del proyecto que finalmente se consensúe. A pesar de ello, aludió la posibilidad de impulsar una primera intervención, sin precisar exactamente cuál. El alcalde eludió también poner números económicos a su proposición, si bien al inicio de la campaña habló de una posible intervención hasta el puente de Armiñán que podría costar entre 60 y 100 millones de euros.

En un momento determinado de su argumentación, De la Torre llegó a señalar que "no hay otra solución" para el río que no pase por su embovedado, para acto seguido asegurar que está "abierto a todas las opciones". "Acepto lo que salga del concurso", añadió.

Para cerrar los quince días de campaña, De la Torre, acompañado del presidente del PP en la provincia, Elías Bendodo, y de todos los integrantes de la candidatura en la capital, participaron en un mítin-fiesta en el barrio de El Torcal, en Carretera de Cádiz. Allí, tras valorar la tarea desarrollada en los últimos cuatro años y criticar duramente los incumplimientos de la Junta de Andalucía, el aspirante a la reelección subrayó el "reto" que queda por delante.

"No son momentos fáciles; pero no nos preocupan los retos, estamos convencidos de que venceremos", dijo De la Torre en una intervención apasionada, de la que fueron testigos varios cientos de vecinos de Carretera de Cádiz y desplazados desde otros barrios. "Pedimos una oleada del voto popular el domingo; avisad a más gente para que vote al PP; estoy con vosotros, estoy con Málaga", sentenció, al tiempo que destacó que es con el voto "como se demuestra la madurez de una democracia, con la participación de la gente".

Antes que él, Elías Bendodo y Carolina España mostraron su convencimiento de que el paso por las urnas permitirá revalidar la mayoría absoluta al PP. "Pido que el domingo inundemos las urnas con votos del PP, porque es la única opción de que Málaga se gobierne a sí misma, siga avanzando y se escriba con mayúsculas", añadió el presidente del PP. España, por su parte, recordó que mientras De la Torre es un hombre "que cumple su palabra", la candidata socialista, María Gámez, "brilla por sus incumplimientos", entre los que citó la reurbanización de Carretera de Cádiz.

Mientras, en las pistas deportivas de El Torcal, decenas de personas se afanaban en la barra dispuesta para el reparto de comida y bebidas y los más pequeños disfrutaban saltando en el interior de un castillo de aire.