Jerez ha vivido cinco mandatos con mayorías absolutas de tres partidos distintos desde la instauración de la democracia. El Partido Andalucista con Pedro Pacheco ostentó todo el poder entre 1983 y 1995; el PSOE de Pilar Sánchez entre 2007 y 2011; y el PP de María José García-Pelayo desde 2011. Ahora, los populares se enfrentan al reto de revalidar una de sus victorias más destacadas en Andalucía, un objetivo que ven peligrar a tenor de las encuestas (la de Commentia para el Grupo Joly le daba 10 concejales, cinco menos que hace cuatro años) por el desgaste de la marca y la irrupción de nuevas formaciones. Los comicios del domingo cuentan con la peculiaridad de que serán los primeros sin Pedro Pacheco como candidato. El ex alcalde está en prisión desde octubre por un delito de malversación de caudales públicos en la contratación de asesores.

El PP ha centrado su campaña en una idea: nosotros o el "caos" de un pacto múltiple del resto de fuerzas (hasta un quintupartito). Su candidata, la alcaldesa, María José García-Pelayo, está convencida de que hay un acuerdo previo en esta línea. Los demás partidos lo niegan.

Hace cuatro años, el PP logró hacerse con más del 46% de los votos gracias en buena medida al castigo infringido a la socialista Pilar Sánchez, que arrastraba una controvertida gestión con un Ayuntamiento en una situación de colapso financiero. Los populares se presentan con el aval de la "normalización" de la vida municipal. Pero el Consistorio sigue siendo uno de los más endeudados de toda España, con débitos que superan los 1.000 millones de euros, y ha necesitado en varias ocasiones del salvavidas del Ministerio de Hacienda para refinanciar préstamos, acogerse a planes de pago a proveedores a pesar de no tener capacidad para afrontar a las devoluciones así como un acuerdo para pagar los importantes adeudos con la Tesorería de la Seguridad Social para levantar la retención que pesaba sobre los ingresos estatales (la llamada PIE). A cambio, ha tenido que aplicar medidas drásticas como la ejecución de un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó a 260 trabajadores municipales, el traspaso de la gestión del agua durante 25 años a una empresa privada a cambio de 80 millones de euros y una notable reducción de gastos en bienes y servicios.

Los ataques hacia la candidata popular, que ya fue alcaldesa entre 2003 y 2004, están vinculados a la investigación que la Audiencia Nacional está realizando sobre unas contrataciones irregulares que realizó el Ayuntamiento en 2004 con empresas de la trama Gürtel. Por el momento hay dos técnicos municipales imputados.

Frente al PP de García-Pelayo, que se presenta por cuarta vez como candidata, se sitúa un PSOE con Mamen Sánchez como cabeza de cartel. Diputada en el Congreso por Cádiz desde 2000 -fue portavoz adjunta del grupo parlamentario socialista- tiene ante sí el reto de levantar al partido tras el descalabro en la convocatoria de hace cuatro años, de ahí que se agarre a los brotes verdes que le han propiciado las dos últimas elecciones celebradas, las europeas de junio del año pasado y las autonómicas de marzo, en las que volvió a ser la formación más votada en la ciudad. La alcaldable ha tenido durante esta campaña que hacer frente al handicap de su debilitada relación con las ejecutivas local y provincial, que le impusieron los integrantes de la lista con la que concurre a las urnas.

La tercera fuerza más votada en 2011 fue Foro Ciudadano, una formación promovida por Pacheco para volver a la primera línea de la vida política tras su enésima marcha del andalucismo -en 2007 se había presentado bajo las siglas del Partido Socialista de Andalucía (PSA) pero no llegó a tomar posesión de su acta tras los malos resultados-. Con su líder en prisión, la formación, que tiene un marcado discurso localista, optó por designar alcaldable a Raúl Ramírez, abogado de profesión y que formó parte de algunos de los gobiernos del ex alcalde. Será ya un triunfo para Foro Ciudadano mantener la representación en el pleno.

Meses atrás hubo conversaciones entre Izquierda Unida y el entorno de Podemos para presentar una candidatura conjunta de izquierdas. Sin embargo, las conversaciones no fructificaron porque, entre otros inconvenientes, IU no quería concurrir a los comicios como agrupación de electores. De este modo, la coalición de izquierdas llega a estas elecciones con Raúl Ruiz Berdejo, secretario local del PCE y empleado de la radiotelevisión municipal, como cabeza de cartel. Este sustituye, no sin controversia por denuncias de irregularidades en las primarias, a Joaquín del Valle, número uno de la formación en las tres anteriores convocatorias. Mientras, Podemos ha apadrinado a la agrupación de electores Ganemos, que se presenta con una candidatura liderada, precisamente, por el secretario local de la formación, Santiago Sánchez.

Finalmente, Ciudadanos confía en entrar con fuerza en la Corporación jerezana de la mano de Carlos Pérez, un empleado de banca que se estrena en política. La formación naranja fue la cuarta fuerza más votada en las autonómicas de marzo.

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