Ya advirtió antes de entrar en el Salón de Chimeneas de la Casa Colón que no daría ningún titular polémico o que generara confrontación. A Ángel Gabilondo se le nota el poco tiempo en la vida pública y el mucho que lleva en el ámbito educativo, por lo que su acto de campaña, arropado por Petronila Guerrero y Francisco Bella, fue de todo menos un mitin.

El socialista, que preguntó a los maestros que asistieron al encuentro qué harían ellos si fueran ministros de Educación, destinó sus primeras palabras a recordar a "tanta gente que no lo está pasando bien, sobre todo quienes están en situación de desempleo" porque, según valoró, de lo contrario, "parece que estamos aquí a nuestras cosas".

Precisamente por ellos y porque "la educación es la mejor política social", insistió en que sólo desde ella se puede combatir la miseria y luchar contra un "modelo de pies de arena", en clara referencia a un sistema económico que, hasta hace poco, estuvo basado en la construcción. Viendo los resultados, valoró que en el fondo "no invertir en educación es carísimo".

"Hay que poner la educación en el corazón de la economía. Una Europa sólo del euro es equivocada; tiene que haber una Europa de la cultura, de lo social y de los ciudadanos", repitió el ministro. Convencido de que no se debe recortar en políticas educativas, sociales y sanitarias, Gabilondo se refirió a la contrapartida: "Pero hay que ser eficientes, transparentes y rendir cuentas". Eso sí, la financiación debe ser "equitativa" y "suficiente".

Tras dar las gracias a la comunidad educativa por su esfuerzo diario y por los logros conseguidos, por ejemplo en la FP, el ministro pidió a los presentes un único favor: "No voy a pediros el voto, al menos directamente. Pero si veis esta noche la tele, os pido que tratéis de identificar si alguno de los que hablan defienden la formación a lo largo de la vida, el apoyo social a los desempleados y la apuesta por la enseñanza pública. Yo no soy militante pero no soy indiferente a lo que ocurre. Supongo que ustedes tampoco".