A lo largo de los siete años que el gaditano José Pedro Pérez-Llorca presidió el Real Patronato del Museo Nacional del Prado, la pinacoteca logró importantes hitos que lo encumbraron de nuevo en su cargo en octubre de 2017, en reconocimiento a su fructífera labor.

Tanto es así que el Museo, de los más prestigiosos del mundo y de los más visitados del país superó sus propias cifras, alcanzando por primera vez los tres millones de visitantes a lo largo de 2016, cifra en la que prácticamente se ha mantenido hasta la actualidad y con lo que se ha consolidado la proyección no sólo nacional, sino internacional de una de las pinacotecas más importantes de Europa.

También han aumentado sus colecciones con importantes adquisiciones como La Virgen de la granada, de Fra Angelico. 

De su mano llegó a Cádiz la muestra 'Los objetos hablan' y en septiembre: 'Los Dioses del Prado'

Entre otros logros acaecidos durante su mandato figura la donación de las doce obras de arte español de los siglos XIII al XV de la familia Várez Fisa. Una colección de pinturas y esculturas que ha permitido completar el discurso del arte medieval y renacentista español, con la incorporación de la pintura italo-gótica La Virgen de Tobed (1359-1362). Del mismo modo el empresario mexicano Plácido Arango donó nada menos que 25 obras maestras en 2015 de firmas tan importantes como Goya, Zurbarán, Pedro de Campaña, Francisco Barrera, Francisco López Caro, Luis Tristán, Alejandro de Loarte y Francisco de Herrera el Mozo.

En estos años también se ha incorporado por unos años a la colección permanente La Virgen de la Leche, de Berruguete, así como las piezas San Juan Bautista en un paisaje, un óleo sobre cobre pintado por Juan Bautista Maíno hacia el año 1610, la lámina de cobre Auto de Fe celebrado en la Plaza Mayor de Madrid realizada en 1680 por Gregorio Fosman y la acuarela Una celestina y los enamorados que Luis Paret pintó en 1784. Tres últimas incorporaciones presentadas en sociedad en mayo del pasado año, a raíz de un nuevo modelo expositivo con el que El Prado pretende lucir las novedades que engrosan su nómina artística. 

Pero el Museo no sólo ha crecido por dentro, pues ha querido extender su patrimonio a otros puntos de España donde han podido verse algunas de sus colecciones, como cuando en junio de 2015 se inauguró en la Casa de Iberoamérica de Cádiz Los objetos hablan, que durante tres meses trajo un pedacito del Prado a Cádiz. Una iniciativa en la que tuvo mucho que ver la estrecha vinculación que ha tenido siempre con su ciudad natal y "las buenas artes de Pérez-Llorca", tal y como reconocía en su día a este medio el exdirector de la pinacoteca, Miguel Zugaza.

En unos meses está previsto que el Prado regrese a Cádiz, el 26 de septiembre de este año, convirtiéndose en una de las pocas ciudades en la que está previsto que se inaugure la muestra Los Dioses del Prado, una exposición inédita organizada por el Museo Nacional del Prado y la Obra Social La Caixa que ofrece una amplia mirada sobre la mitología clásica y su representación a través de pinturas. Otro nuevo hito alcanzado gracias a las negociaciones entre el alcalde y Pérez-Llorca.

La muestra está compuesta exclusivamente por obras del Museo del Prado, fechadas entre los años centrales del siglo I a. C. y finales del siglo XVIII, y ofrece una amplia mirada sobre la mitología grecorromana y su representación por parte de artistas de la talla de Francisco de Zurbarán, José de Ribera, Pedro Pablo Rubens, Michel-Ange Houasse, Francesco Albani, Corrado Giaquinto o Leone Leoni, entre otros.

En estos años José Pedro Pérez-Llorca también se enfrentó a la crisis económica que salpicó las cuentas de la pinacoteca, que ha supo superarse alcanzando un porcentaje muy alto de autofinanciación.

Un rosario de logros que los miembros del patronato reconocieron en su día al político, diplomático y jurista, al que consideraron como "la persona idónea para presidirlo también en los próximos años, en los que el Museo encarará acontecimientos de especial relevancia".

Y es que José Pedro Pérez-Llorca se ha marchado el año en que el Prado -que atesora la mejor colección de pintura española, las piezas más importantes de la pintura flamenca e italiana, y notables ejemplos de la escuela alemana, francesa e inglesa-, afronta la celebración de su bicentenario en 2019, así como la esperada culminación de su expansión física con la incorporación del Salón de los Reinos, que fue adscrito al Museo hace dos años y que será moldeado con los cánones del proyecto que firma el famoso arquitecto Norman Foster, actualmente pendiente de los Presupuestos Generales del Estado de 2018.