A este peso pesado del PP la política le viene de familia. Sobrino de un histórico de la UCD como Marcelino Oreja, ha sido ministro del Interior (1996-2001) y cuatro veces candidato a lehendakari. Ahora vuelve a encabezar por segunda vez la lista a la Eurocámara, pero la figura de Jaime Mayor Oreja (San Sebastián, 1951) quedará indisolublemente unida a la lucha contra ETA por muy lejos que los designios de la política le lleven.

-¿Quién se juega más en estas elecciones Zapatero o Rajoy?

-Se juegan más los españoles y España, porque estas elecciones son decisivas en la medida en que los españoles vamos a tomar una posición ante la crisis. Son las elecciones ante la crisis de mayor envergadura de todas las que hemos conocido en España, en Europa y en el mundo. Y, como todo en la vida, la primera decisión es esencial; o te instalas en la crisis o confías en una alternativa para superarla.

-¿Está en sus manos el futuro inmediato de Rajoy?

-Rajoy no se juega nada en estas elecciones más allá de lo que se juegan los líderes de los partidos cuando se celebra cualquier elección. Insisto, no es Rajoy, es España; es abrir o no una nueva etapa en la política española porque las elecciones europeas siempre han sabido abrir etapas en España. En el año 94 abrimos la etapa del Gobierno de Aznar del 96, y 15 años después tenemos la oportunidad de que una nueva mayoría abra un nuevo escenario para España.

-¿Está en retroceso la izquierda europea?

-Los estudios y las encuestas a nivel global en toda Europa proyectan un 10% más de representación de escaños para el Partido Popular Europeo (PPE) que para el Partido Socialista. En los grandes países, los más significativos y representativos, el socialismo es la fotografía de la crisis, de tal envergadura como la propia crisis. La crisis les ha hecho entrar en crisis a los socialistas. El laborismo inglés está perdiendo las europeas, el socialismo en Italia está desaparecido, en Francia compite por el segundo puesto y en Alemania están simplemente tratando de mantenerse en el segundo puesto.

-¿Qué gana Europa con el PPE?

-En el caso de Andalucía, lo que los andaluces se juegan es estar en el corazón de Europa con el PPE, que es el partido que va a liderar y superar la crisis en el conjunto de Europa. Andalucía se juega la oportunidad de estar y de apostar por un resultado que confirme que hay una nueva mayoría mirando a Europa para gobernar desde el corazón de Andalucía en las siguientes autonómicas.

-¿Por qué el PSOE les recrimina que no hablen de Europa cuando dedican luego sus vídeos a cuestiones nacionales como el Yak?

-Tampoco hablan ni de España ni de Europa, sino que lo hacen del PP. Toda la estrategia, las palabras y los planteamientos son para descalificar al PP. La Europa social es un latiguillo contra el PP, y hablan del PP porque lo que no pueden hacer es hablar del presente ni del horizonte inmediato, ni tampoco de España ni de Europa, porque su balance es el fracaso. Por eso Andalucía es una comunidad decisiva, no habrá una nueva etapa en España sin que Andalucía esté en la cabeza. En anteriores ocasiones fueron Valencia o Madrid, pero Andalucía es ahora decisiva para que abramos una nueva etapa en España, y eso tiene que empezar el 7-J en Andalucía.

-Ha habido también muchos reproches de que sólo se habla de la crisis pero, ¿hay algo más europeo que hablar de la crisis?

-No lo hay. La crisis es la realidad en España y en Europa. Siempre digo que de Europa hay que hablar todos los días, pero lo que no puedes pedir es que se hable dos semanas de Europa cuando llevas cuatro años y diez meses sin hacerlo.

-¿El impacto de la crisis sería menor con el PP?

-Estuve ayer en Madrid con Rodrigo Rato, que me ha ayudado muy activamente en la campaña y en los debates, y recordaba con él que en el año 2002 el Gobierno supo que en épocas de bonanza había que introducir reformas en España. Y llegó el famoso decretazo y lo hizo la huelga general, pero aquel gobierno no sólo terminó con cinco millones de nuevos empleos sino que Rajoy y Aznar creyeron que había que cambiar más cosas, no se instalaron en el éxito. Luego llegó Zapatero y quiso emular los resultados económicos del PP sin hacer nada, sin reforma alguna, y por eso la economía española se infartó. No sé qué hubiera pasado con el PP, pero el PP no hubiera permanecido impasible. Algunos venden que se va a salir de la crisis, pero no se saldrá sin hacer los cambios necesarios.

-¿Ha sido ésta una campaña de excesos verbales?

-A mí me han dicho de todo y, desde luego, no quiero escucharlo, pero si alguien hace una tabla de los insultos que hemos podido recibir los candidatos del PP estoy seguro de que la victoria socialista sería de 10 a 0.

-En su condición de ex ministro del Interior, ¿se ha llegado a comprometer la seguridad de Aznar en esta espiral de declaraciones subidas de tono?

-Desvelar el número de escoltas de una persona que tienes que proteger es de una gravedad inusitada. Un ministro responsable no puede hacer ese tipo de declaraciones, eso es una crisis de responsabilidad.

¿Desaparecerá ETA en 2016 como aventuró Rubalcaba?

-ETA está preparando su siguiente proyecto político.

¿Por dónde va a pasar?

-ETA está configurando un movimiento nacionalista sin el PNV, lo que llaman el polo soberanista. Quisieron echar al PNV del Gobierno vasco, y es evidente que de lo que ahora se trata es de liderar el movimiento nacionalista ahora que no tienen referentes de gobierno en el País Vasco. ETA va a volver a tentar al Gobierno con otro proceso de negociación, habrá una segunda parte.