El PP ha aprobado hoy en Valencia su modelo de partido y su proyecto político para los próximos años en medio de declaraciones optimistas sobre las posibilidades de volver al Gobierno y con la intervención de José María Aznar como lo más destacado de la jornada de mañana en el XVI Congreso de Valencia.

El frío saludo de ayer a Mariano Rajoy ha sido objeto de numerosos comentarios en los pasillos, con dos denominadores comunes: muchos dirigentes del PP decían no haber visto lo que sí vieron los periodistas, mientras otros lo calificaban de anécdota sin trascendencia.

Aznar y Rajoy hoy han estado algo más efusivos, antes y después de que el ex presidente del Gobierno subiera a la tribuna para reclamar, entre otras cosas, que María San Gil y José Antonio Ortega Lara, vuelvan al partido.

Además, José María Aznar ha advertido de que no tendría sentido renunciar a un proyecto "de éxito y solvente", y ha pedido que no se olvide que en 1996 la fórmula de éxito del PP fue, primero ganar las elecciones y después gobernar con diálogo y acuerdos".

"Por ese orden, que no se nos olvide", ha dicho un Aznar que ha reivindicado su gestión y ha insistido en que en el PP que salga de este congreso tienen que estar los mejores y nadie debe quedar en el camino.

Pero, precisamente, en su ponencia política, el PP ha eliminado las referencias al PNV que figuraban en el texto original y ha dejado abierta la puerta a hablar con los nacionalistas si abandonan la "deriva soberanista".

Otra de las novedades aprobadas anoche, que el presidente del partido salga de los congresos convertido automáticamente en candidato a la presidencia del Gobierno, ha motivado la "sorpresa" de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien se ha enterado por la mañana a través de los medios de comunicación.

A la una y media se ha cerrado el plazo para presentar candidaturas y, como se esperaba, sólo se ha registrado la encabezada por Mariano Rajoy.