El rey Felipe VI visitó ayer las alas 15 y 31 de la Base Aérea de Zaragoza, en la que fue su primera visita a estas instalaciones desde que accediera al trono hace casi un año.

Durante más de tres horas que duró el recorrido, el Monarca pasó por diferentes hangares de aviones, donde se interesó por las labores de mantenimiento que desempeñan los efectivos allí destinados, así como por un simulador de vuelo de Hércules y también por una de estas aeronaves.

El Rey, que llegó en helicóptero a la pista de la base zaragozana sobre las diez y media de la mañana, estuvo acompañado durante todo el recorrido por el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire, Francisco Javier García Arnáiz, y por el jefe de la Base Aérea, el general de Brigada, Julián Roldán.

El Ala 15, la primera de las que visitó , fue creada en 1985. Los primeros F-18 que alberga llegaron al año siguiente procedentes de Estados Unidos y su bautismo de fuego en operaciones reales se produjo en 1994, cuando fue requerida para las misiones de paz que la OTAN desarrolló en Bosnia-Herzegovina y Kosovo.