El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, aseguró ayer en su visita al País Vasco que se necesitan líderes políticos "que crean en la fuerza de la unión y no en la disgregación", que sólo "debilita" a la hora de hacer frente a "los desafíos" como el desempleo, la desigualdad, la pobreza y la falta de oportunidades". El líder socialista aseguró que existen "alternativas políticas", como la que representa su partido, que aboga "por la integración y por la convivencia de todos los ciudadanos y todos los pueblos de España".

Además, el líder del PSOE, señaló que los socialistas, "una vez que lleguemos al Gobierno y allí donde estamos gobernando desde el 24 de mayo", van a trabajar para "abrir" el diálogo entre los trabajadores y empresarios para que haya "espacios de codecisión" de los trabajadores en las decisiones estratégicas de las empresas.

Sánchez se reunirá hoy con el lehendakari, Iñigo Urkullu, con la situación económica, el modelo de Estado y la paz como temas centrales de la cita, lo que supondrá una primera toma de contacto entre el presidente del Gobierno y el líder socialista. El encuentro estaba pendiente desde que Sánchez accediera a la Secretaría General del PSOE en julio de 2014. La reunión se celebrará, finalmente, hoy a instancia del líder socialista, aprovechando su visita a Euskadi.