“Yo no descarto al segundo diputado, estamos a muy poco”. José Ignacio García, coordinador provincial de Podemos, comentaba con otro compañero cómo iba a avanzando el escrutinio. No se equivocaba. Unidas Podemos se ha hecho finalmente con el último diputado en liza y su segundo representante en la provincia, manteniendo los escaños logrados en 2016 por Cádiz.

“Muchos nos daban por muertos, parecía que la derecha en todas sus versiones venían como subiditos y al final se han quedado en nada”, ha manifestado García a los periodistas con los resultados ya casi al 100%. “Más de 100.000 vecinos de la provincia siguen confiando en esta fuerza de cambio, quieren una transformación profunda de nuestra tierra para sacar adelante el país sin dejar a nadie atrás y nos han dado su confianza”, apuntaba.

No ha habido mucho ambiente en la sede de Ganar Cádiz, lugar escogido por la confluencia para la noche electoral, pero las caras han ido cambiando tal y como ha avanzado el escrutinio. No es que el lugar se haya convertido en una fiesta pero los rostros han delatado que quizás esperaban peores resultados. “En la casa de los pobres las alegrías son pocas, estamos contentos”, ha manifestado Fernando Macías, coordinador provincial de Izquierda Unida tras las preguntas de los medios.

“Nos mantenemos como tercera fuerza en la provincia y con la misma representación institucional en un contexto difícil”, ha añadido el representante de Podemos, el único dirigente de la formación presente. Ni Noelia Vera, número 1 de la candidatura, que está en Madrid como portavoz nacional de la formación, ni Juan Antonio Delgado, número 2, que mantendrá su escaño en Madrid, han pasado allí la jornada. García ha destacado el trabajo de los apoderados de los colegios en un contexto difícil con la derecha, que estaba “subidita” y “bravucona”.

Macías ha apostado por “transmitir alegría”. Los que están “tristes” son otros en estas elecciones generales, venía a decir. Aquí “todo lo contrario”, añadía. El también alcalde de Medina resaltaba que habían obtenido un resultado “muy digno contra la derecha, la derechita y la derechona”. Y avisaba que ahora tienen otro reto, el de las elecciones municipales. "Vamos a estar atentos con aquellos que puedan tener la tentación de haber pedido el voto con la mano izquierda y gobernar ahora próximamente con la mano derecha “

La pérdida de alrededor de 20.000 votos (en 2016 obtuvieron 130.643 y hoy cerca de 109.000) la achacan a que son dos contextos diferentes y "difícilmente comparables". "Ha habido una movilización de la derecha en los últimos meses y nosotros hemos tenido que ponernos frente a ella y la mejor forma es una alternativa que defienda los derechos de la mayorías. A la vista está que nos hemos mantenido y que son las otras derechas las que hoy estarán tristes", ha apuntado José Ignacio García.