Eurocopa 2008

España-Grecia: el partido de la intrascendencia y el orgullo

  • Grecia intentará no despedirse con cero puntos en el casillero ante los suplentes de Luis.

Los extremos se tocan. España, ya clasificada primera en el Grupo D, y Grecia, última y eliminada, librarán mañana en Salzburgo una batalla con casi nada en juego: apenas las ganas de los suplentes españoles por mostrarse y el orgullo de los defensores del título por no despedirse en cero de una Eurocopa para el olvido.

El gol de David Villa en el último instante ante Suecia, junto a la segunda derrota consecutiva encajada en el torneo por el equipo de Otto Rehhagel, frente a Rusia, ordenaron el panorama en el Grupo D, donde suecos y rusos lucharán por el restante cupo en cuartos de final.

Así, el partido a jugarse en el estadio Walz-Siezenheim de Salzburgo se transformó en intrascendente para ambos contendientes. Aunque, como siempre que el fútbol convoca, el honor de alguna manera se pone en juego.

Para la golpeadísima Grecia, será un partido de emociones fuertes. Por un lado, significa su despedida de Austria/Suiza 2008, y con ello de cuatro años mágicos en los que ostentó la corona continental ganada en Portugal 2004, para sorpresa del mundo. Y por el otro, el comienzo de una nueva etapa, ya que el fracaso de un equipo "viejo" - casi la mitad del plantel tiene más de 30 años- dará paso a una inevitable renovación.

Primer signo de ella es el retiro de la selección del emblemático portero Antonio Nikopolidis, de 37 años y quien ante España afrontará su último partido con la camiseta nacional. También para el defensor Paraskevas Antzas llegó la hora del adiós.

El último campeón europeo saldrá a enfrentar a España presumiblemente con un equipo mixto -compuesto por titulares y suplentes-, en el que son baja los lesionados Giourkas Seitaridis, Vassilios Torosidis y Theofanis Gekas, mientras que Georgios Karagounis sigue siendo duda con problemas en una rodilla.

Por el lado del campamento español éstas son horas felices. Ante Grecia jugará la otra selección roja: Luis Aragonés confirmó en el entrenamiento del lunes que hará hasta diez cambios respecto al último once ante Suecia.

El veterano entrenador tiene en claro que el intrascendente cotejo de Salzburgo es un mero preámbulo para el duelo que verdaderamente importa, el del domingo en Viena, y decidió aprovechar el choque de mañana para darle rodaje a los suplentes y preservar a los habituales titulares.

Así, España jugará en defensa con Alvaro Arbeloa, Juanito, Raúl Albiol y Fernando Navarro; en el centro del campo estarán Rubén de la Red, Xabi Alonso, Cesc Fábregas, Andrés Iniesta (el único titular habitual) y Sergio García; y Dani Guiza solo en la punta.

La única duda sería la portería, en la que podría estar Pepe Reina o Andrés Palop. Iniesta estará en el equipo titular por la banda izquierda, un puesto que estaba destinado para Santi Cazorla, en la enfermería junto a otros dos lesionados leves, los titulares Carles Puyol y David Silva.

"Mi idea es cambiar a casi todos porque somos ya primeros y hay que dar oportunidades a la gente para que me demuestren que pueden estar en cualquier momento", señaló Aragonés, quien en los últimos entrenamientos hizo hincapié en las jugadas de estrategia y en el repliegue defensivo.

Grecia, el único equipo que de momento no ha puntuado ni ha marcado un gol, quiere despedirse de la Eurocopa al menos con un buen sabor de boca ante una España "dulce", que pretende seguir ganando a la espera de su propia hora de la verdad.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios