Feria de Málaga

Lo que pudo ser y no fue

  • El malagueño Saúl Jiménez Fortes cortó una oreja al primero de su lote , de la ganadería de El Pilar, en una tarde en la que Ponce se fue de vacío al igual que Morante de la Puebla, que sigue sin romper en Málaga

GANADERÍA: Se lidiaron cuatro toros de El Pilar y dos de Juan Pedro Domecq. El primero de la tarde fue pitado en su arrastre. El sexto fue devuelto y en su lugar salió el sobrero de la ganadería de Parladé. TOREROS: Enrique Ponce, de gris y oro y remates blancos. Pinchazo hondo trasero (silencio). Estocada caída (ovación). José Antonio 'Morante de la Puebla', de verde y oro. Pinchazo, media estocada caída y contraria (ovación). Pinchazo hondo, dos descabellos (pitos). Saúl Jiménez Fortes, de berenjena y oro. Estocada (oreja). Estocada contraria (palmas). Incidencias: Novena de abono. Dos tercios de plaza. Juan José Trujillo, de la cuadrilla de Jiménez Fortes, se tuvo que desmonterar al parear al sexto de la tarde.

Era la última corrida de a pie. Las esperanzas de contemplar todo lo que no se había podido ver hasta ahora estaba, lógicamente, estaba en la tarde ayer. Y había buenas razones para confiar en que así fuera. Volvía a estar el diestro Enrique Ponce, que venía sustituyendo al lesionado Manzanares, después de que el pasado jueves dejara frío al personal con una actuación hasta cierto punto aliviada. También estaba el siempre esperado, aunque no llegue, Morante de Puebla que cuenta con seguidores muy fieles, a los que casi habría que llamarle devotos, y que nunca había roto en la plaza de toros de Málaga. Y siguió sin hacerlo. Cerraba el cartel Saúl Jiménez Fortes, la esperanza, y realidad, del toreo local. Pues de todo esto, sólo el malagueño estuvo más cerca de cumplir con lo esperado. Cortó una oreja a su primero demostrando que posee otras grandes virtudes además de su consabido y admirable valor. El ejemplar de El Pilar salió sin fijeza y no permitió demasiado el lucimiento de Fortes con la capa. Tras brindar el toro, lo fue alejando de las tablas y ahí demostró su gran potencial. Toreó muy despacio y con mucho temple dejando grandes tandas que el público aplaudió mucho. Creó estampas de gran belleza pero que se afeaban porque el toro perdía mucho las manos.

Aún así, el diestro siguió dejando constancia de su buen hacer con la muleta y por naturales estuvo a un gran nivel. Volvió a matar muy bien, como ya hiciera en su comparecencia del pasado jueves, y al caer el toro después de la gran estocada, vino la oreja.

Su segundo, el sobrero de Parladé, lo brindó al presidente de la Diputación Provincial, Elías Bendodo. Se mostró muy firme y con las zapatillas muy bien asentadas en el albero. Tras una estocada caída, recibió palmas por su actuación.

El otro autor de los mejores momentos de la corrida de ayer fue el valenciano Enrique Ponce, quien cuenta con mucha simpatía en Málaga. Se le ha visto triunfar muchas veces. Si como decíamos su actuación del jueves no supo a nada, ayer cabía la esperanza de que pudiera dar más de sí y es cierto que se le vieron más cosas.

En su primero estuvo bien con el capote y en su faena dejó muestras de su maestría como un cambio de mano de grandísima calidad. Uno a uno le iba sacando pases a su enemigo pero el toro ya no tenía ni fuerza ni acometividad. Es más, antes de entrar a matar el toro se echó dos veces. Cuando al fin se puso en pie, la suerte suprema se saldó con un pinchazo hondo trasero. El diestro fue silenciado y el toro fue pitado en su arrastre.

Ante el segundo de su lote, uno de los dos ejemplares de la ganadería de Juan Pedro Domecq que se vieron en la tarde de ayer, dejó grandes lances con la capa en el recibo lo que empezó a encender al público. Y precisamente al respetable le brindó la muerte del animal. Por el pitón izquierdo su oponente se mostraba más correoso y pero plasmó momentos de gran elegancia. Hubo petición pero no mayoritaria. Se quedó en una ovación.

Por su parte, Morante de la Puebla dejó con el capote los mejores detalles de su paso por la Feria de Málaga. Su selló personal quedó impreso en algunas verónicas ejemplares. Por lo demás, ovación y pitos para el de la Puebla del Río.

Ya solamente lo que queda es el cartelón de la corrida de rejones de hoy y tocará poner la mente en la Feria de la Vendimia, en la que estará uno de los triunfadores de agosto. También se irán conociendo los fallos de los distintos jurados. De momento ya ha caído la primera deliberación y ha sido por parte de la Asociación de Aficionados Prácticos de Málaga que ha concedido a Alejandro Talavante el trofeo Joselito El Gallo por su faena al toro Enemigo del pasado miércoles. Este galardón, que cumple su segunda edición, reconoce la mejor lidia de la Feria de Agosto.

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