Formentera es destino de verano, por eso el ritmo en la cocina de Can Dani, capitaneada por Ana Jiménez, es imparable. Un ritmo que gracias a la pasión por los fogones de la catalana y al gran equipo con el que cuenta han convertido al restaurante del chef de Dani García en uno de los referentes de la isla. El año pasado se hicieron con una estrella Michelín. "Cuando Dani me llamó no me lo creía, pensé que me estaba gastando una broma. Desde entonces y hasta ahora he sentido bastante presión pero por fin he conseguido relajarme y el verano está siendo muy bueno", cuenta Ana, para quien el mayor premio es que cuando la gente prueba sus creaciones disfruten con ellas. Unos platos en los que prima la cocina de raíz. Así la definen desde el restaurante. "Me gusta mucho la cocina tradicional, es la base de mis platos. Soy una enamorada de la dieta mediterránea y siempre utilizo productos de la tierra. Aquí en Formentera es muy importante para nosotros el pescado". Si se tiene que decantar por uno de sus platos lo hace por unas vieiras. "En esta época del año son estupendas, es un producto fresco, agradable para el calor. Las cocino con butifarró, que es como una morcilla, con aceite de sobrasada de aquí y con un punto cítrico". Ese último toque es el que define a la chef. "Si tuviera que elegir un ingrediente o sabor ese sería el cítrico. El vinagre y los quesos también los tengo muy presentes".

Trabajar para Dani García es un placer para Ana. "Somos como un matrimonio, nos queremos y odiamos al mismo tiempo. Pero llevar 9 años bajo sus órdenes quiere decir que formamos un buen tándem". Para la chef no ha sido fácil llegar hasta aquí. Reconoce que este no es un mundo fácil para las mujeres pero la decisión que tomó un día de dejar de ser camarera para entrar a las cocinas ha sido la mejor que ha podido tomar. Este éxito le ha llevado a la televisión. Es la presentadora del programa Dieta Mediterránea en Canal Cocina. "En un principio dije que no a la tele, me asusté porque no soy amiga de lo mediático. Pero al pensar que me gustaría enseñar a la gente que con productos de la tierra se pueden hacer platos fáciles me hizo lanzarme". Al igual que en su cocina lo son los clientes, para Ana lo más importante en la tele son los espectadores. "Que la gente me envié fotos de lo que han aprendido conmigo es la mayor recompensa".